Tribunales

Dos porteros de discoteca afrontan 5 y 6 años por agredir a dos estudiantes en Valencia

El fiscal pide se aplique la agravante de reincidencia para uno de los porteros, que ya ha sido condenado en dos ocasiones por delitos de lesiones

Imagen de archivo de la Policía Local de València
Imagen de archivo de la Policía Local de ValènciaPOLICÍA LOCAL DE VALÈNCIAPOLICÍA LOCAL DE VALÈNCIA

La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia juzga este jueves a dos hombres que trabajaban en funciones de control y vigilancia en una conocida discoteca del centro de València, que supuestamente agredieron a dos estudiantes de 19 y 20 años que celebraban una fiesta en este local y que se enfrentan a penas de hasta seis años.

El fiscal pide se aplique la agravante de reincidencia para uno de los porteros, que ya ha sido condenado en dos ocasiones por delitos de lesiones, y que su pena se incremente hasta los seis años, frente a los cinco que pide para su compañero, que no tiene antecedentes penales.

Los hechos se produjeron el 20 de mayo de 2021, cuando aún existían restricciones sanitarias en este tipo de locales de ocio.

La acusación pública mantiene que los procesados, que tenían orden de no permitir que los asistentes se levantaran de sus sillas, llamaron la atención varias veces a un joven cuando se levantaba para bailar.

En un momento de la noche, llamaron a la víctima al escenario para que recogiera un premio, pero uno de los vigilantes no se lo permitió.

En este momento, se inició una discusión en la que el personal de la discoteca lo inmovilizó y lo llevó a un rincón donde le pegaron un puñetazo en el costado que lo dejó aturdido. Cada procesado lo cogió de un brazo para arrastrarlo a la salida del local cuando, según la acusación pública, lo lanzaron por las escaleras donde se golpeó en la cara, nariz y boca.

El perjudicado sufrió un traumatismo facial y serompió tres dientes, entre otras lesiones.

Esa misma noche, otro estudiante fue expulsado de la sala de fiestas por levantarse de la mesa donde se encontraba en varias ocasiones. Al intentar acceder de nuevo, uno de los procesados le inmovilizó y le dio un puñetazo en la mandíbula.

En concepto de indemnización, el fiscal pide para la primera de las víctimas más de 20.000 euros por el tratamiento odontológico y los implantes, en caso de necesitarlos. Para el segundo, 220 por el periodo que tardó en curarse.

El fiscal hace extensiva la responsabilidad civil a la empresa gestora de la discoteca y a la aseguradora de este local.