Aumento sin control de los jabalíes en la Comunitat Valenciana

Las imágenes de jabalíes campando a sus anchas por huertos, carreteras, calles y playas de la Comunidad Valenciana, se han convertido ya en algo frecuente y habitual. Y lo seguirá siendo de no adoptarse ninguna medida efectiva. Así lo asegura un informe realizado por la Dirección General de Medio Natural de la Conselleria de Transición ecológica del Botànic en 2022.

Según este documento, las previsiones de grupos de investigación a nivel nacional y europeo establecen que la Comunitat presenta una tasa de crecimiento de la población de este mamífero «alta, así como un alto potencial de expansión en los próximos años».

El informe añade que «posiblemente la mayoría de las poblaciones de la región se encuentran en una situación cercana a su mayor nivel de productividad y teóricamente aún quedaría un amplio margen de aumento de sus poblaciones en los próximos años».

Durante la temporada 2020-2011 se abatieron un total de 35.559 ejemplares de jabalíes en la Comunitat, el máximo histórico de la serie disponible para esta especie, que representa el 85 por ciento del total de las capturas realizadas en caza mayor.

Sin embargo, todas estas capturas, dice el informe de la Conselleria del anterior Gobierno valenciano, no son suficientes para invertir el crecimiento de su población, que seguirá aumentando de no aplicarse «cambios significativos».

Este animal está presente en toda la Comunitat, pero especialmente en las comarcas del norte de la provincia de Alicante (Marina Alta o El Comtat) y del sur de la provincia de Valencia (especialmente La Safor).

Los perjuicios que provoca este animal en los cultivos son ya bien conocidos. Precisamente el pasado jueves LA RAZÓN publicaba los destrozos provocados por varios ejemplares de esta especie en un campo de melones de la localidad de Ontinyent (Valencia).

Pero no hay que olvidar otro indicador igual o más imporante. Y es que la especie que ocasiona mayor siniestralidad por accidentes de tráfico en la Comunitat es el jabalí. Nueve de cada diez siniestros con especies cinegéticas conocidas son ocasionados por un ejemplar de esta especie.

Según este estudio, el jabalí no solo mantiene su área de distribución en la Comunitat, sino que está colonizando nuevos territorios y ambientes en los que la especia no ha estado presente en décadas anteriores, como son los humedales costeros y zonas del perímetro de algunas ciudades.

Tanto las zonas húmedas como los entornos urbanos son espacios con importante presencia humana y tráfico rodado, donde los impactos de la especie pueden ser muy importantes.

A raíz de la elaboración de este documento, la anterior consellera de Agricultura, Isaura Navarro (Compromís), anunció el pasado mes de marzo un Plan de Gestión de las Poblaciones de Jabalí en la Comunitat Valenciana, con nuevos mecanismos para controlar el crecimiento de esta especie. Pero dicho plan nunca llegó a implementarse manera completa debido al cambio de Gobierno en mayo.

Sin embargo, todo hace pensar que el actual conseller de Agricultura, José Luis Aguirre (VOX), tomará cartas en el asunto y, además de manera rápida y contundente. Aguirre se reunió el pasado día 4 de agosto con representantes de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA), quienes le acompañaron hasta un campo de Picassent muy afectado por los efectos de este animal.

Durante la visita, el nuevo dirigente agrario se comprometió a reunir a todas las partes implicadas, junto a la Conselleria de Medio Ambiente y la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), a fin de estudiar medidas que permitan tanto reducir el exceso de fauna silvestre como ayudar a los agricultores afectados.

El conseller de Agricultura lamentó «que hemos llegado a esta plaga por una mala gestión y una dejadez del anterior Consell. Este gobierno va a estar al lado de los agricultores. Vamos a escuchar a las organizaciones agrarias para estudiar las posibles soluciones. Es evidente que hay que tomar cartas en el asunto y controlar el exceso de población, que se está multiplicando a una velocidad desesperada».