Salud

«A los maestros se les ha quitado la capacidad de formar seres humanos»

Bartolomé Pérez es psiquiatra y dirige la Oficina de Salud Mental y Adicciones de la Generalitat valenciana

El director de la Oficina de Salud Mental y Adicciones, Bartolomé Pérez
El director de la Oficina de Salud Mental y Adicciones, Bartolomé PérezMER

Psiquiatra, experto en adicciones y conocedor de la administración pública, puesto que participó en el Consell del PP entre 1995 y 2005, Bartolomé Pérez ha sido el elegido por el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, para dirigir la Oficina de Salud Mental y Adicciones de la Generalitat valenciana, responsable de un plan de salud mental del que por ahora se conoce únicamente la parte referente a los niños y adolescentes.

La semana pasada anunciaron pruebas psiquiátricas en los colegios para detectar posibles patologías en los niños y adolescentes, ¿en qué consistirán y como se articulará la relación entre los colegios y la parte sanitaria?

Si nos preocupa la salud mental infantil y las tasas de suicidio, se trata de detectar los síntomas de posibles conductas peligrosas, que son la punta del iceberg. Aquí lo importante es la prevención. ¿Cómo hacemos para actuar antes? Vamos a meter a gente para que, ante cualquier cosa extraña que note, se empiece la detección precoz. Hay una cuestión de cajón, hay unos informes de salud que hay que hacer. Si están viendo si el niño ha desarrollado el habla, el corazón, la movilidad... hagamos un cribado, algo muy básico. En la práctica significa hacer dos preguntas altamente sensibles. Prefiero falsos positivos que falsos negativos, y para eso ya hay protocolos internacionales hechos. Aquí en España en salud mental siempre nos hemos mirado el ombligo.

¿Entre qué edades deberían hacerse esas pruebas?

Los americanos te aconsejan que por debajo de los siete años no tiene utilidad. Entonces, básicamente a partir de los siete y ocho años.

Y en el caso de que se detecte algún síntoma, ¿cuál será el siguiente paso?

Pues lo que se haría con cualquier otra anomalía o síntoma, enviarle a un especialista. O sea, es introducir en el sistema sanitario la detección de situaciones de riesgo de salud mental, de síntomas. Entonces la educación, ¿qué pinta?, es donde están los niños y las niñas. Además responde a la demanda de los profesores y profesoras, de qué hacer ante problemas de este tipo con niños en las aulas. Lo que hace falta no es otro protocolo, sino que rápidamente haya un teléfono para que venga alguien del servicio de psiquiatría para ver qué ocurre aquí.

¿De qué síntomas deberían estar pendientes los padres?

Si a mi hijo lo veo retraído, lo veo extraño y veo que no tiene contacto, algo pasa.

¿Cómo hemos llegado al punto de que los niños tengan problemas de salud mental?

El papel de la escuela como ente formativo del individuo no existe desde hace tiempo. Nosotros depositamos a nuestros hijos en la escuela, luego intentas lo que puedes, pero realmente la educación de nuestros hijos se la dan sus maestros, son quienes les enseñan a controlarse, a marcar límites, a controlar la impulsividad... y desde hace muchos años todo eso no pueden hacerlo. El bullying, el suicidio... no deja de ser un acto impulsivo. Con 12, 13, 14 años, necesitas conductualmente que te enseñen a marcar límites. Hay 1.000 motivos para explicar los problemas actuales con los niños y adolescentes, pero yo diría que el primero es que se le ha quitado a los maestros la capacidad de formar seres humanos. El problema es la falta de límites, y los límites no se enseñan con mano dura, se enseñan con motivación.

¿Cómo influyen las redes sociales en la salud mental de los niños?

Esa es la parte horrible de las nuevas tecnologías, pero el problema es que los padres no puedan quitarle el móvil a un niño de 12 años. Bueno, entonces la autoridad parental, ¿dónde está? A todos nos han puesto límites, o ¿creen que los de las otros generaciones llegábamos a casa y nos poníamos a estudiar?

¿La sanidad pública está preparada para asumir la salud mental?

Cualquier país está en condiciones para asumir lo que es la detección. Esto lo han hecho países sin medios económicos, con problemas mucho más serios que los nuestros. Se trata de introducir en cualquier examen rutinario de salud algunas preguntas sobre salud mental, y no hace falta que lo haga un psicólogo. Con los psicólogos tenemos un problema, y no es un problema de dinero, sino de falta de profesionales. Hay tres tipos de psicólogos: el psicólogo especialista en psicología clínica, que es el único que puede trabajar en el sistema de salud, de los que generamos 22 al año, es decir que no puedes decir que vas a sacar 60 plazas al año, porque no los tienes. Luego están los psicólogos generales sanitarios y finalmente los graduados.

¿Cuáles son sus objetivos?

En menos de dos años necesitamos que todos los hospitales que tienen una unidad CTC, que forman psiquiatras y psicólogos, estén acreditados. Para eso hacen falta más recursos en los departamentos de salud, más camas y hospitales de día, equipos domiciliarios... en salud mental. De infantil solo tenemos un hospital de día en toda la comunidad. Otro principio fundamental es la equidad, el ciudadano de Xátiva es tan importante como el del "cap i casal". En Torrevieja tienen dos psiquiatras por cada 1.000 habitantes. Tenemos pocos recursos y tenemos una inequidad absoluta territorial. Me preocupa especialmente la formación de especialistas, porque es medida estructural de cara al futuro, y para eso hay que tener unos recursos, de forma que el departamento de salud se autoabastezca. Yo quiero que todos tengan los mismos recursos con la misma ratio. Vamos a poder estar entre los tres primeros en recursos.

La salud mental, ¿no ha sido tratatada como algo importante dentro de la sanidad pública hasta ahora, que las tasas de suicidio son tan elevadas?

Cualquier suicidio es intolerable, pero lo importante no es la tasa de suicidio, que es una drama. La novedad no son tanto los suicidios consumados, que son un drama, sino que lo que se ha disparado son las consultas por ideación. Es el indicador de que algo pasa. Hay que empezar por la base, por la escuela, por atención primaria... Que sea algo más integral. Esto no son ideas peregrinas, esto viene del programa electoral.