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El mayor mercado de productos frescos de Europa se encuentra en esta ciudad española

Se trata además de uno de los edificios modernistas más emblemáticos de la ciudad

Imagen del interior del Mercado Central de Valencia
Imagen del interior del Mercado Central de ValenciaLa Razón

Una de las visitas obligadas en la ciudad de Valencia es, sin duda, el maravilloso edificio del Mercado Central, una experiencia que no solo resulta enriquecedora por los múltiples olores, colores y productos frescos de calidad que ofrece, sino porque se trata de uno de los edificios modernistas más emblemáticos de la ciudad. Una gigantesca despensa de arquitectura modernista, que contiene todos los productos frescos de la huerta y todo el sabor y olor del Mediterráneo en su interior.

Se trata además del mayor mercado de productos frescos de Europa, además de destacar por la rica y variada oferta alimenticia, se ubica en uno de los edificios modernistas más emblemáticos de la ciudad. Con una superficie de más de 8.000 metros cuadrados, está repleto de alusiones decorativas a los productos de la huerta y los jardines de Valencia. Su estructura, formada por columnas de hierro, que recuerdan a la Torre Eiffel, azulejo y vidrieras, lo convierte en atractivo arquitectónico que no hay que dejar de visitar. Pero en la ruta no sólo se disfruta del continente, el contenido rebosa alegría, colores, aromas, sabores… mucha vida y mucho Mediterráneo, en definitiva. Es un lugar donde se une la compra tradicional con los cada vez más numerosos turistas que frecuentan este espacio.

Este ágora de la gastronomía valenciana cuenta con cerca de 300 puestos en los que destacan las frutas y hortalizas frescas, con la naranja, el tomate y la judía como protagonistas; las carnes; los quesos; los pescados y mariscos, en cuyos puestos llama la atención las anguilas vivas; las especias; los frutos secos y un largo etcétera. Si tu intención no es comprar, pero quieres catar la calidad del producto, puedes hacer una parada en Central Bar, el bar tradicional del Mercado Central, que ahora está en manos del chef Ricard Camarena, donde ofrecen tapas, raciones y bocadillos con lo mejor que las paradas ofrecen cada día. Tanto para hacer la compra como para disfrutar de una mañana gastronómica, el Mercado Central es un lugar mágico.