Arte
La Galería de las Colecciones Reales exhibe temporalmente "El Calvario" de Rogier van der Weyden
Patrimonio Nacional ha aprovechado las obras de remodelación de los museos de Pintura y Arquitectura del Monasterio de El Escorial para mostrar a un público diferente esta obra de la pintura flamenca
La Galería de las Colecciones Reales exhibe desde este viernes 5 de diciembre y hasta el final de la primavera de 2026 "El Calvario" de Rogier van der Weyden (1457-1464). Patrimonio Nacional ha aprovechado las obras de remodelación de los museos de Pintura y Arquitectura del Monasterio de El Escorial para mostrar a un público diferente esta obra de la pintura flamenca. El óleo se puede contemplar en la plaza central de la Sala de los Austrias, junto al Cristo de Lorenzo Bernini. Patrimonio Nacional está invirtiendo 6,5 millones de euros de los Fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia en el Real Sitio de El Escorial.
Los proyectos que engloban este presupuesto incluyen, además de los museos de Pintura y Arquitectura y la reforma de los accesos al Real Monasterio, la rehabilitación del Claustro de Evangelistas, el nuevo Centro de Recepción de Visitantes -ya inaugurado- y varias actuaciones relacionadas con la mejora de la eficiencia energética y la sostenibilidad. Concretamente, la rehabilitación de los Museos de Pintura y Arquitectura cuenta con un presupuesto de 2,5 millones de euros. La nueva propuesta museográfica para las nueve salas de la pinacoteca contempla una reordenación expositiva que refleja el coleccionismo de los monarcas. A su regreso al Real Monasterio, "El Calvario" ocupará un lugar preeminente de la nueva instalación museográfica, que compartirá con un centenar de obras.
"El Calvario" de Rogier van der Weyden es una tabla de gran formato que destaca por esta característica en el conjunto de la obra del maestro flamenco. En el centro, la figura de Cristo crucificado, representada a tamaño natural, se alza sobre una cruz bajo un dosel fingido de intenso color rojo. A ambos lados, la Virgen y San Juan resaltan con sus vestidos blancos, dando una impresión casi escultórica.
"El dramatismo de las imágenes y la plasticidad de las formas, características del artista, se intensifican aquí gracias a la monumentalidad de la composición y a la agitación tormentosa de los paños, en fuerte contraste sobre el fondo", explica Patrimonio Nacional en un comunicado. La historia de esta obra está vinculada a El Escorial desde su llegada al Monasterio de Prestado en 1567, antes incluso de la finalización del edificio. Desde entonces, el cuadro no ha salido de allí excepto en 2011, cuando se sometió a un minucioso proceso de restauración que hoy permite contemplarla en todo su esplendor.
La restauración incluyó la recuperación de la curvatura original del soporte, la consolidación de los paneles y la limpieza de la capa pictórica, así como la eliminación de barnices oscurecidos y repintes que permitieron recuperar su profundidad y colorido.