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Protestas

Huelga sorpresa en el Louvre: el personal denunció condiciones "insostenibles"

El museo más conocido del mundo volvió este lunes a atravesar una breve crisis, cuando trabajadores de recepción o seguridad decidieron no abrir las puertas durante toda la mañana a modo de protesta

Museo del Louvre
Museo del LouvreCanva

El Museo del Louvre ha empezado la semana con mal pie. Es el espacio museístico más visitado del mundo, y no es la primera vez que esta fama le causa estragos. El último ocurrió durante la mañana de este lunes, durante un suceso tan sorpresivo como breve, y que aún dilatándose poco en el tiempo ha dado de qué hablar. Una huelga espontánea por parte del personal de recepción del Louvre provocó su cierre repentino durante la mañana de ayer. Trataron de denunciar la sobreafluencia turística, así como el deterioro de unas condiciones laborales que definieron como "insostenibles". Según informa "Le Figaro", el museo, rodeado por colas de turistas desconcertados durante toda la mañana, no abrió hasta las 14:30 horas.

El mismo lunes, durante una reunión rutinaria, docentes del museo, personal de recepción y de seguridad anunciaron una huelga espontánea y sin previo aviso, algo que ocurre por primera vez pese a haberse dado huelgas en otras ocasiones en el museo, en 2019 y 2013. Ha sido, más bien, una llamada de atención, una manera de reivindicar desde dentro el caos al que se somete este lugar a diario. "En 15 años hemos perdido alrededor de 200 empleos equivalentes a tiempo completo", reivindicó Christian Galani, miembro del sindicato y representante del museo, en una entrevista con AFP. Protestan por la afluencia masiva de visitantes al espacio, que contrasta con la falta de personal, señalando asimismo, y como consecuencia de esta situación, "el deterioro de las condiciones de visita" para el propio público.

Visitantes toman la foto de Mona Lisa de Leonardo da Vinci en el museo del Louvre, en París
Visitantes toman la foto de Mona Lisa de Leonardo da Vinci en el museo del Louvre, en ParísLR

El Louvre es el museo más popular del mundo. Suele tener un aforo diario limitado de 30.000 visitantes, llegando a acoger en 2024 a casi 9 millones de personas en total, de las cuales 80% eran turistas extranjeros, y situándose en estas cifras por delante de otros icónicos espacios como el Met de Nueva York o los Museos Vaticanos. Una situación que para los trabajadores se vuelve insostenible, y que sin embargo no dejan de afrontar pues, según Sarah Sefian, representante sindical de CGT-Cultura, si bien el museo cierra los martes los trabajadores regresarán para que se puedan abrir las puertas con normalidad este miércoles.

Una espera de años

Esta breve huelga ocurre meses después de que surgiese otra crisis en el seno del museo. Su director, Laurence des Cars, hizo saltar las alarmas el pasado enero al denunciar el deterioro al que se enfrentaba la institución, destacando entre otros asuntos infiltraciones de agua y la mala temperatura en las salas de conservación de las obras. Ante esto, el presidente francés Emmanuel Macron anunció un colosal proyecto de renovación, cuyo coste se estima entre 700 y 800 millones de euros que se invertirán a lo largo de diez años. Un plan titulado "El nuevo renacimiento del Louvre", y que incluirá medidas para descongestionar la icónica pirámide de acceso, así como para ubicar la "Mona Lisa", obra que más espectadores aglutina, en una sola sala.

No obstante, no es suficiente este plazo para unos trabajadores que, apuntó Sefian a "Associated Press", "no podemos esperar años para recibir ayuda. Nuestros equipos están bajo presión ahora. No se trata sólo del arte, sino de las personas que lo protegen".