Las diez "capillas sixtinas" españolas: estos son los lugares que no te puedes perder
Algunos de las catedrales, ermitas o santuarios españoles poseen elementos que recuerdan a la obra de Miguel Ángel en Ciudad del Vaticano
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Hace más de quinientos años, el papa Julio II encargó a Miguel Ángel la decoración de la bóveda de la Capilla Sixtina. El artista de Caprese se encargó de pintar todos los frescos del techo, desde 1508 y durante cuatro largos años, hasta que logró terminar su trabajo. Era 1512, y su obra en el Palacio Apostólico de la Ciudad del Vaticano se transformó en uno de los lugares más emblemáticos del mundo, con millones de visitantes cada año. Durante estos cinco siglos, se ha intentado emular esta increíble creación en muchos lugares occidentales, incluso también en España, donde en muchas ciudades podemos encontrar las versiones españolas de este apoteósico lugar.
La Capilla Sixtina cuenta con una forma rectangular de 40.9 metros de largo, 13.7 metros de ancho y 20.7 metros de altura. La Creación de Adán, junto al resto de las pinturas que adornan la bóveda, fueron una superación de la esfera del arte. Y aunque se trate de una gran creación artística irrepetible e inigualable, nuestro país cuanta con varias "Capillas Sixtina" repartidas por todo el territorio.
La iglesia de San Nicolás es uno de los edificios religiosos más visitados de Valencia junto con la catedral. Un auténtico tesoro barroco y un impresionante ciclo pictórico de casi 2.000 metros cuadrados, ejecutados por los pinceles del valenciano Dionís Vidal, lo que le ha llevado a que se le otorgue el sobrenombre de Capilla Sixtina.
La imagen actual del edificio se llevó a cabo entre 1419 y 1455, y de aquella época gótica podemos encontrar el arco conopial y el rosetón de la fachada. Fueron los domínicos quienes dedican esta nueva Parroquia a San Nicolás Obispo, patrón de la Orden, ya que su fundador, Santo Domingo de Guzmán, escribía por aquel entonces las Constituciones de la Orden de Predicadores en el Convento de San Nicolás de Bolonia.
En el siglo XIX, el entorno de la parroquia cambia sustancialmente. De esta época destaca la fachada sur neogótica que se abre a la plaza. El templo, tristemente, fue saqueado en la Guerra Civil, y en 1981, fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional. Restaurada por la Fundación Hortensia Herrero en el siglo XXI, abre espacios y obras desconocidas hasta ahora.
La capital de España no podía quedarse atrás, y entre sus recovecos podemos encontrar esta joya arquitectónica fundada por Felipe III a principios del siglo XVII (en torno a 1624). La Iglesia de San Antonio de los Alemanes, situada en el distrito Centro -cerca de Gran Vía-, es un templo barroco pintado completamente al fresco.
Dedicada de sus orígenes a San Antonio de Padua, fue catalogada como "la joya de la corona" por Felipe V, en su construcción y decoración intervinieron grandes maestros de la época como Francisco Seseña, Francisco Ricci (que se encargó de decorar la cúpula) o Francisco Carreño de Miranda (quien pintó a San Antonio ascendiendo hacia la Virgen), entre otros.
A lo largo de su historia ha sufrido diversas restauraciones e intervenciones que han mantenido este templo barroco. Con una peculiar forma de elipse, cuenta con su cúpula como gran estrella, de grandes dimensiones y forma elíptica. En la parte central de esta, se puede ver la "Gloria de San Antonio", una escena en al que el santo recibe al Niño Jesús de manos de la Virgen. Por otro lado, a cada lado del altar mayor hay tres retablos con cuadros ligeramente hundidos y medallones de reyes españoles.
Asimismo, la cripta de la iglesia es de un tamaño reducido. Es visitable, como el templo, y en su interior se puede encontrar un altar.
Felipe II visitó la pequeña ermita y la bautizó como "la Reina de las Ermitas". Ya existía en la etapa de dominación musulmana, y durante el siglo XVI fue sustituida por otra de fábrica renacentista, y fue elevada a título de basílica por Juan Pablo II en 1989. Se trata de la Basílica de la Virgen del Prado, en Talavera de la Reina, que abarca varios estilos como renacimiento, barroco o rococó. Escenas de la vida de la Virgen y de Cristo o de santos aparecen representadas en los diferentes azulejos de cerámica distribuidos por el templo, que fueron colocados entre los siglos XVI y XX.
Denominada como "Capilla Sixtina de las cerámicas", a lo largo de sus paneles exteriores e interiores se pueden contemplar todo un recorrido por la historia de la cerámica talaverana. Por ejemplo, en el pórtico principal podemos ver un friso con escenas muy bellas de Adán y Eva, San Antonio Abad con los animales o el Descendimiento, así como la Piedad, el entierro de Cristo o el desfile de los soldados de Cristo y las mártires ante Jesús protagonizada por la figura del emperador Carlos V arrodillado.
El retablo mayor que alberga la imagen de la Virgen del Prado se construyó en 1854, con un diseño neoclásico tardío flaqueando el camarín y hornacina de la Virgen con dos pares de columnas.
En este pequeño territorio zaragozano, se puede encontrar una de las "capillas sixtinas" de Aragón. En el cimborrio de la Catedral de Nuestra Señora de la Huerta, en Tarazona, se esconden una serie de pinturas que representan algunas de las figuras mitológicas existentes y entremezcladas por personajes bíblicos. Una serie de pinturas descubiertas gracias a una serie de trabajos de restauración llevados a cabo y que permanecían ocultas debido al Concilio de Trento.
Los estudios sugieren que con la reconquista de Alfonso el Batallador en 1119 y la práctica de la fe cristina, se decidió recuperar este espacio tan relacionado con el cristianismo. Las reconstrucciones se desarrollaron entre los siglos XV y XVI lo que hace que se introduzcan importantes obras de estilo mudéjar como la reforma del claustro, la torre campanario, el cimborrio y el aspecto de la planta falsa que se encuentra sobre la nave central.
La catedral fue realizada en estilo gótico francés, para mantiene ejemplos de estilo mudéjar. Cuenta con un importante patrimonio huella de la importancia que tuvo la ciudad desde época romana. Fue declarada Bien de Interés Turístico en 2002, y a lo largo de su restauración en estos treinta años, se han ido encontrando hallazgos arqueológicos y artísticos que se han desencadenado.
Podemos encontrar varios estilos arquitectónicos en este templo. Por ejemplo, la planta de la catedral, que cuenta con tres naves, es puramente gótica. Mientras, el claustro, el exterior o la decoración de la galería norte es mudéjar. También podemos ver que el trascoro, el atrio y la capilla de San André es de estilo barroco y la decoración interior de la catedral, por su parte, es renacentista.
En Castilla y León, se encuentra una de las catedrales más desconocidas de toda España. La iglesia de Santa María de Mediavilla, una joya del renacimiento ubicada en la localidad vallisoleta de Medina de Rioseco.
Considerada como "la Capilla Sixtina de Castilla", dentro de la iglesia de Santa María de Mediavilla es de especial importancia la Capilla de la Concepción, también conocida como Capilla de los Benavente. Fue realizada durante el siglo XVI, y destaca su magnífica construcción realizada por Juan del Corral, sus esculturas de yeso policromado de Jerónimo del Corral y el retablo de madera policromada de Juan de Juni.
La cúpula está dividida en una serie de compartimentos por sus numerosos nervios que no se cruzan en el centro, formando tres grupos: en el exterior, personajes del Antiguo Testamento, como Moisés o David; hacia el interior, una serie de representaciones astrológicas, tales como Júpiter o Saturno, y entre ellas medallones con ángeles portadores de los instrumentos de la Pasión; por encima de los personajes del Antiguo Testamento, las virtudes -es decir, Fe, Esperanza, Caridad, Prudencia, Templanza, Justicia, Fortaleza y Bondad; se intercalan entre ellas medallones con los escudos de la familia Benavente. Por último, cabezas aladas de querubines rodean el octógono central decorado con estrellas sobre fondo azul.
El retablo de la cabecera está presidido por la Inmaculada Concepción, en el ático dos ángeles coronan a María, en torno a la que se organizan diversos relieves dedicados a su genealogía y vida.
El Panteón de los Reyes de de la Real Colegiata de San Isidoro de León es también conocido como la "Capilla Sixtina del Arte Románico". Constituido por mandato de Fernando I y Sancha como cementerio real, en él se enterraron once reyes, doce reinas, diez infantes, nueve condes y diferentes nobles. Destacan sus carteles cargados de simbolismo con escenas de la prefiguración de Cristo como el sacrificio de Isaac, así como las primeras representaciones de Cristo en arte medieval.
La Real Colegiata de San Isidoro sorprende desde el primer momento y es considerada como una de las obras románicas más importantes de Europa. Pero sin duda, las joyas son sus pinturas, que no destacan en sí por su estética, sino también por su técnica al fresco.
A día de hoy, se encuentra en un maravilloso estado de conservación, y algunas de las escenas más relevantes son la Anunciación de los Pastores, la Santa Cena, la Crucifixión o el Apocalipsis de San Juan.
En la provincia de Soria, se puede encontrar la ermita de San Baudelio de Berlanga una de las más desconocidas joyas culturales de España, como es el caso de la localidad de Casillas de Berlanga. A unos dos kilómetros de su casco histórico se encuentran algunas de las huellas cristianas más antiguas de la Península Ibérica, la Ermita de San Baudelio de Berlanga.
Construida a finales del siglo XI, bajo la advocación de San Baudelio, la ermita se ejecutó en estilo mozárabe, y constituye la mayor joya de la arquitectura prerrománica en Soria. Consta de dos cuerpos rectangulares, realizados con mampostería; la puerta de acceso tiene doble arco de herradura en las arquivoltas y jambas. En el área posterior del ábside, se encuentra una Necrópolis rupestre medieval
En el siglo XX, su gran tesoro interior -pinturas murales maravillosas de estilo mozárabe que recubrían sus muros y techos- fue repartido entre el Museo del Prado de Madrid y varios museos de Estados Unidos, aunque las escasas pinturas que todavía se conservan en la ermita hacen que esta sea conocida como la Capilla Sixtina del Arte Mozárabe.
A las afueras de Fuente del Arco, en la provincia de Badajoz, fue construido un santuario en honor a la Virgen del Ara en el siglo XV. Un centro de peregrinación de estilo mudéjar que se transformó en un lugar indispensable para los amantes del arte. Y es que su única nave está cubierta por una bóveda de cañón, que en el siglo XVII fue decorada con unos maravillosos frescos de estilo barroco.
Y es que al igual que en el Palacio Episcopal de San Pedro del Vaticano, se pueden encontrar pinturas que representan el Génesis, entre otras fantásticas pinturas. Asimismo, las pinturas geométricas son las más antiguas que están en la ermita.
La ermita de la Virgen del Ara, por la que cada año pasan más de 20.000 personas, recibe el sobrenombre de 'Capilla Sixtina' de Extremadura por la espectacularidad de los frescos del siglo XVII que decoran su interior. Fue declarada Bien de Interés Cultural en 2018.
La Capilla Sixtina extremeña tiene otros misterios. Se sabe que es muy antigua, pero no cuánto. La primera vez que se hace mención a la ermita es en el siglo XIV, en un escrito perteneciente al Libro de la montería, del rey Alfonso XI.
Aunque no se trate de una iglesia, lo cierto es que la sensibilidad y técnica empleada en las pinturas que se contemplen en sus paredes y techos transformó a la Cueva de Altamira en Patrimonio Mundial de la UNESCO. Sus pinturas, unas de las más antiguas del mundo, la han llevado a considerarla como la Capilla Sixtina del arte rupestre, tan asombrosas que incluso los investigadores llegaron a cuestionar su autenticidad.
Las pinturas y grabados de la cueva pertenecen, principalmente a los períodos Magdaleniense y Solutrense y, algunos otros, al Gravetiense y al comienzo del Auriñaciense, esto último según pruebas utilizando series de uranio. Las últimas dataciones confirman que fueron creadas diez mil años antes de lo que se esperaba.
Los secretos de esta cueva cantábrica se encerraban no solo en el techo de los polícromos, sellado por el derrumbe de la entrada de la cavidad hace unos 13.000 años, sino en decenas de pinturas y grabados repartidos en los casi 300 metros de recorrido de sus galerías.
Otro de los recursos turísticos más importantes de nuestro país es el de la Cueva del Soplao, que se encuentra en la Sierra del Arnero desde hace millones de años. Formada por Estalactitas o estalagmitas, es considerada como la Capilla Sixtina de la geología, gracias a los juegos de luces, sombras, olores y formas que se van apreciando a cada paso.
Esta cavidad fue descubierta accidentalmente durante las labores de perforación minera, siendo aprovechada posteriormente para la extracción de minerales. Se trata de un entramado de grutas muy extenso y desarrollado por varios niveles. En él, se pueden encontrar varias galerías como la Galería de los Fantasmas, una sala natural que destaca por la cantidad de gruesas formaciones de estalagmitas blanquecinas y pisolitas emergiendo del suelo que, por su figura, dieron lugar al nombre de la galería.
Otras destacadas es la Galería del Falso Suelo, la Galería del Campamento o la Galería Gorda.