Rubén Puga: "Damos la posibilidad de invertir en obras de 1.500 euros a 350 millones"
El CEO de Grupo Fidelistas & Company impulsa iniciativas "pioneras en el mundo" con el fin de "democratizar" el arte
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Rubén Puga ha logrado lo que muchos pensaban imposible: combinar el arte con las finanzas. Como CEO de Grupo Fidelitas & Company, un conglomerado empresarial que ha crecido rápidamente en el ámbito de la gestión patrimonial, Puga ha revolucionado la forma en que los inversores perciben el arte y otros activos alternativos. Su trayectoria profesional ha sido clave para lanzar este proyecto, pero su impulso no viene solo del ámbito profesional. Su vida personal lo ha llevado en más de una ocasión a replantearse su misión en el mundo de los negocios. El resultado ha sido la creación de un grupo empresarial diverso y disruptivo que, desde sus raíces en el mundo del arte, ha sabido expandirse a otros sectores.
¿Cómo ha influido su trayectoria en la fundación del grupo?
El Grupo Fidelitas & Company nace de mi experiencia previa en el sector financiero. Fui director de banca privada y director institucional en cuatro entidades financieras en España, como Banco Santander o Triodos Bank. Después, mi carrera me llevó a Europa, donde fui banquero en Rothschild en París y Zúrich. Más tarde trabajé para la Familia Real británica como su banquero especializado en arte y finanzas. Durante ese tiempo lancé un proyecto para cotizar obras de arte de más de 50 millones de euros desde un punto de vista financiero. A partir de ahí, surgió la idea de aplicar este modelo a clientes con menores volúmenes de inversión, lo que me llevó a fundar Fidelitas ARTe, donde esta materia se trata como un activo financiero. Desde entonces hemos crecido considerablemente al expandir nuestras líneas de negocio.
Esto suena bastante innovador. ¿Cómo funciona exactamente el modelo?
Lo que quería era dar la posibilidad de que cualquier persona pudiera diversificar su patrimonio fuera del estándar de mercado. Con 25 años de experiencia sabía que se tenía que transformar. Nuestro modelo en Fidelitas ARTe es único. Lo que hacemos es ofrecer a nuestros clientes la posibilidad de invertir en arte como activo financiero, algo que nunca antes se había bancarizado de esta manera. Tenemos cuatro líneas principales: pintura, escultura, joyería y fotografía. De manera pionera en el mundo, permitimos que cualquier persona pueda comprar una obra y obtener una rentabilidad desde 1.500 euros. No somos una galería de arte convencional, sino que hacemos proyectos de arte y gestión discrecional desde un enfoque financiero. En otras palabras, lo que buscamos es democratizar el arte, permitiendo que más personas puedan acceder a él y que lo vean como una inversión.
Menciona la democratización del arte. ¿Podría profundizar un poco más en cómo lo logran?
Muchos creen que el arte es algo exclusivo, solo al alcance de unos pocos, pero nosotros queremos cambiar esa percepción. En Fidelitas ARTe ofrecemos la posibilidad de alquilar o invertir en obras desde importes asequibles, como 50 euros al mes, permitiendo a más personas acceder a este mercado. Tenemos artistas en diferentes niveles: desde emergentes, cuyas obras pueden costar entre 1.500 y 3.000 euros, hasta artistas «all masters», cuyas obras alcanzan los 350 millones de euros. El abanico es muy amplio.
¿Cuáles son las otras áreas de negocio en las que están involucrados?
Grupo Fidelitas & Company está compuesto por siete empresas que tienen el objetivo de diversificar los activos de nuestros clientes: Fidelitas ARTe; Fidelitas Real Estate, que asesora a nuestros clientes en inversiones inmobiliarias, desde la compra de hoteles hasta residencias de lujo; Fidelitas Business Consulting; Fidelitas Music; Fidelitas Fashion, muy interesante también porque fusiona arte y moda; Fidelitas Advisors; y el exclusivo Club Financiero Madrid, al estilo Nueva York y único en toda Europa.
Incide mucho en la «diversificación del patrimonio». ¿Por qué es tan importante?
La diversificación es clave. La regla de oro de los banqueros a nivel internacional indica que el 15% del patrimonio de un cliente debería estar en arte, un 35% en el sector inmobiliario, otro 35% en financiero y el 15% restante en activos alternativos. Por eso hemos estructurado nuestro grupo de empresas de esta manera. La diversificación permite reducir el riesgo y aprovechar las oportunidades en distintos sectores. De hecho, nuestros clientes obtienen una rentabilidad mínima del 6%.
La realidad es que esto está funcionando, ¿qué pasos va a seguir el grupo a corto plazo?
La expansión internacional es una parte muy importante de nuestro plan de negocio. Actualmente tenemos oficinas en Madrid, Marbella y Palma de Mallorca, pero estamos en proceso de expansión hacia Dubái, Bombay y Miami. Creemos que nuestro modelo disruptivo tiene el potencial de ser escalable y de generar un gran impacto en diferentes mercados.
Además de su carrera en la banca, su historia personal también ha sido clave en la creación de este grupo.
A pesar de tener una posición cómoda en la banca, siempre tuve la inquietud de emprender y trascender en el ámbito del arte, la cultura y las finanzas. Pero lo que realmente hizo que me replanteara mi vida fue una experiencia con mi hijo mayor, quien sufrió un ataque epiléptico que lo llevó a una situación de vida o muerte durante varios meses. Esto me hizo reflexionar profundamente sobre lo que quería aportar al mundo y a la sociedad. Estamos muy vinculados a proyectos solidarios. Participamos activamente en la lucha contra el cáncer o con «Infancia Sin Fronteras», donando obras de arte. Definitivamente, creo que hay que impactar en la sociedad a través del arte, la cultura y las finanzas, y por eso estamos haciendo todo este gran proyecto al que se están sumando grandes entidades financieras, las principales aseguradoras y clientes muy importantes de todos los sectores.