Esta es la donación de Roca Rey para "devolver parte de aquello que yo recibí"

El torero peruano Andrés Roca Rey, padrino del Proyecto de Fomento de la Cultura Taurina de Andalucía 2024, ha demostrado su compromiso con las nuevas generaciones con la donación de más de 30.000 euros destinados a las Escuelas Taurinas de Andalucía.

Esta acción no solo evidencia su cercanía con los jóvenes desde el ruedo, sino también su voluntad de involucrarse activamente en la formación de quienes están llamados a liderar el futuro de la tauromaquia. Con este respaldo, Roca Rey quiere contribuir al desarrollo de los novilleros que se preparan en estas escuelas, reforzando así la continuidad de una tradición profundamente arraigada en la cultura andaluza.

Durante el acto de entrega, acompañado por Eduardo Ordóñez, presidente de la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas “Pedro Romero”, el torero destacó que "las Escuelas no solo enseñan a torear; también inculcan valores fundamentales que enriquecen a la sociedad y moldean a las futuras figuras del toreo".

"Yo también fui un joven con sueños, y nunca olvido a quienes están comenzando. Esta ayuda es mi forma de devolver parte de lo que recibí, y de apoyar a quienes buscan abrirse camino en esta profesión", expresó el diestro limeño.

Los fondos se distribuirán entre las distintas escuelas taurinas de Andalucía, con el objetivo de reforzar sus programas formativos, promocionar a nuevos talentos y asegurar la transmisión de la cultura taurina a las nuevas generaciones.

Un compromiso que viene de lejos

No es la primera vez que Roca Rey muestra su implicación con los más jóvenes. Ya en 2023 donó capotes y muletas a la Escuela Taurina de Valencia, en un gesto que reflejaba su cercanía con quienes inician su andadura en el toreo.

La Corrida de la Juventud: un evento con visión de futuro

Como colofón a esta apuesta por el futuro, el próximo 18 de octubre se celebrará la Corrida de la Juventud, un evento pionero que reunirá a miles de jóvenes aficionados en torno a Roca Rey y otras figuras emergentes. Prevista originalmente para marzo, esta cita se ha convertido en el broche final de la temporada, con una fuerte carga simbólica: celebrar el presente con la mirada puesta en el mañana de la tauromaquia.