Fútbol

Fútbol

Marcan los centrales y Gerard Moreno hace la diferencia

El delantero fue decisivo en la victoria del Villarreal en Kiev, aunque los goles los marcaron Pau Torres y Albiol

Albiol celebra el segundo gol del Villarreal
Albiol celebra el segundo gol del VillarrealSERGEY DOLZHENKOEFE

El Villarreal ve más cerca los cuartos de final de la Liga Europa después de una victoria rematada por los centrales e ideada por Gerard Moreno. El delantero internacional ofrece mucho a su equipo. No le hace falta marcar goles –aunque es el Pichichi del equipo– para ser decisivo. Hace mucho más que eso, siempre ofrece una salida a sus compañeros y mira al mejor colocado para regalarle un gol.

A veces no le hace falta ni mirar, como sucedió en el primero de Pau Torres. Puso el balón a la entrada de su compañero, que sólo tuvo que empujarla para adelantar al Villarreal. En el segundo, Albiol aprovechó un rechace a un disparo de Gerard. Y estuvo cerca de regalar el tercero a Paco Alcácer.

El Villarreal entró al campo con la idea de que la eliminatoria llegara encaminada a su estadio. En los primeros seis minutos ya había disparado dos veces. Una ocasión de Trigueros y otra de Pedraza y apenas dejaba espacio para que el Dinamo de Kiev se desarrollara. Parejo controlaba el centro del campo y el partido era de los amarillos, muy superiores a su rival.

Las carreras de Gerson Rodrigues por la izquierda eran el único camino por el que los ucranianos se acercaban a la portería de Rulli. El guardameta argentino se ocupa de la portería en la Liga Europa, pero un rodillazo en la cara hizo que Asenjo calentara para estrenarse esta temporada en la competición.

No hizo falta. Sí tuvo que retirarse tras el descanso Pau Torres. El central internacional se marchó con unas molestias musculares que pueden complicar la llamada de Luis Enrique para los próximos compromisos.

Pau regresaba al estadio donde hace unos meses sufrió una derrota con la selección. Fue por un gol de Tsygankov, que volvió a ser el más peligroso de su equipo.

Pero el Villarreal lo tenía todo controlado. Intentó encontrar algún gol más en el contraataque con pelotazos que buscaban a Bacca o a Gerard Moreno.

No llegó el tercero, pero tampoco sufrió Rulli, que no tuvo que esforzarse demasiado para que su portería se mantuviese a cero. El Villarreal se marcha con la satisfacción del deber cumplido, aunque con preocupación por el estado de Pau Torres, que disfrutó de la victoria de su equipo desde la grada en la segunda parte sin muchas muestras de dolor.