El deporte renuncia al dinero de Putin por la invasión de Ucrania

La guerra de Rusia contra Ucrania tiene un impacto directo en el deporte, cuyas competiciones se están viendo alteradas por el conflicto bélico, al tiempo que los vínculos económicos con las empresas que proceden del país que preside Vladimir Putin empiezan a romperse. La UEFA, el Manchester United, el Schalke 04 o la escudería Haas de Fórmula 1 verán, con toda probabilidad, alterados sus ingresos. En el caso de Haas podría estar en riesgo incluso su viabilidad.

El histórico Schalke 04, ahora en la Bundesliga 2, anunció este jueves que retiraba de su camiseta la publicidad de Gazprom, el principal patrocinador del club desde el año 2006 y que se estima que controla el 17% de las reservas de gas mundial. “En vista de los acontecimientos y los desarrollos de los últimos días, el Schalke 04 ha optado por retirar de sus camisetas la publicad de su principal patrocinador Gazprom”, expuso la entidad en un comunicado.

Cuando se firmó el acuerdo en 2006, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, se fotografió con el entonces máximo dirigente del club, Clemens Tönnies, mientras los dos sostenían una camiseta del equipo. Se estima que Gazprom inyecta nueve millones de euros al año al Schalke, una cifra que se doblaba cuando el club estaba en la Bundesliga 1.

Antes de que se desatara el conflicto ya había dimitido el representante de Gazprom en el Consejo de Vigilancia del Schalke, Mathias Warnig. Empresario y antiguo colaborador del Ministerio de Seguridad del Estado, la temida Stasi, en la República Democrática Alemana (RDA), Warnig es considerado un hombre de confianza de Putin.

En una posición delicada queda también la UEFA por su relación con Gazprom, que patrocina la Liga de Campeones desde 2012 como socio premium. En mayo de 2021, la UEFA y Gazprom firmaron un nuevo acuerdo por tres años que incluía la próxima Eurocopa y las finales de la Liga de Naciones 2021 y 2023. “Gazprom ha demostrado ser uno de nuestros socios más fiables y nos alegra dar la bienvenida a la empresa como patrocinadora en el campo de los equipos nacionales de la UEFA”, declaró el director de marketing de UEFA, Guy-Laurent Epstein.

Según informó Deutsche Welle, Gazprom también tiene a un hombre dentro de la UEFA, ya que Alexander Djukov pertenece desde abril de 2021 a su comité ejecutivo. Antes de convertirse en 2019 en presidente de la Federación rusa, había sido durante 11 años presidente del Zenit de San Petersburgo, el club de Gazprom en la ciudad natal de Putin. Además, preside el consejo del consorcio petrolero Gazprom Neft. San Petersburgo era la sede de la final de la Liga de Campeones de esta temporada, pero la UEFA ha decidido trasladar el partido a París. La Fórmula 1 también ha cancelado el Gran Premio de Rusia, que se iba a celebrar en Sochi el 25 de septiembre.

El Manchester United es otro club con importantes vínculos con Rusia y está reconsiderando el acuerdo que le une a la aerolínea rusa Aeroflot. Esta es la aerolínea oficial del club desde 2013 y la que utiliza habitualmente en sus desplazamientos europeos, pero esta semana ya no recurrieron a sus servicios para trasladarse a Madrid para disputar su partido de Champions contra el Atlético. El Gobierno británico ha prohibido que los aviones de Aeroflot vuelen en el espacio aéreo del Reino Unido y las autoridades aéreas del país les han retirado la licencia de vuelo.

La escudería Haas de Fórmula 1 podría ver en peligro su viabilidad, ya que durante los test de pretemporada que se celebran en Barcelona ha decido retirar de sus monoplazas la publicidad de Uralkali. Esta empresa rusa de fertilizantes es el patrocinador principal y gran sustento económico del equipo norteamericano. Gracias al dinero de Uralkali llegó a Haas el piloto ruso Nikita Mazepin, cuya continuidad está ahora en el aire. El padre de Mazepin, Dmitry, es un oligarca próximo a Putin.

En el Reino Unido, el empresario ruso Roman Abramovich cedió “a los fideicomisarios de la Fundación benéfica del Chelsea la administración y el cuidado” del club. “Creo que actualmente están en la mejor posición para velar por los intereses del club, los jugadores, el personal y los aficionados”, informó el propio Abramovich en un comunicado. Esta decisión del empresario, que compró el equipo en 2003, llegó después de que el diputado del partido laborista Chris Bryant pidiera en la Cámara de los Comunes que se requisaran los bienes de Abramovich en el país. Además del Chelsea, el ruso posee una mansión valorada en más de 135 millones de euros en el centro de Londres.

Comunicado de Abramovich:

“Durante mis casi 20 años como propietario del Chelsea FC, siempre he visto mi papel como un custodio del club, cuyo trabajo es garantizar que tengamos todo el éxito posible hoy, así como construir para el futuro, al tiempo que desempeñamos un papel positivo en nuestras comunidades. Siempre he tomado decisiones teniendo en cuenta los intereses del club. Sigo comprometido con estos valores. Por ello, hoy confío a los fideicomisarios de la Fundación benéfica del Chelsea la administración y el cuidado del Chelsea FC.

Creo que actualmente están en la mejor posición para velar por los intereses del Club, los jugadores, el personal y los aficionados”.