Getafe C.F.

El «sportinguista» Marcelino

El técnico del Villarreal, en el ojo del huracán. Los rivales creen que no lo dio todo para ganar el partido ante «su» equipo

El entrenador del Rayo Vallecano, Paco Jémez, durante el partido frente al Levante.
El entrenador del Rayo Vallecano, Paco Jémez, durante el partido frente al Levante.larazon

El técnico del Villarreal, en el ojo del huracán. Los rivales creen que no lo dio todo para ganar el partido ante «su» equipo

«Ojalá el Sporting se mantenga», había dicho Marcelino durante la semana. El técnico del Villarreal, que ya había cumplido de alcanzar la Liga de Campeones, no puede esconder su origen asturiano ni su pasado. Como jugador, se crió en la cantera del Sporting, al que entrenó después y estuvo a punto de subir a Primera.

Marcelino quería que «su» equipo se mantuviera en la máxima categoría y su alineación no contradecía sus palabras. A su lado en el banquillo se sentaban Asenjo, Víctor Ruiz, Bruno, Denis Suárez, Bakambu y Soldado. Todos titulares. La única concesión a la pelea parecía la presencia en el equipo de Leo Baptistao, un ex rayista. Tampoco parece que la preparación del encuentro fuera demasiado exhaustiva. El preparador del Villarreal dio descanso a sus jugadores desde el domingo pasado hasta las seis de la tarde del jueves. Demasiado tiempo como para meterse en un partido en el que su equipo no se jugaba nada.

El Sporting marcó pronto, en el minuto 8, con un gol de Jony y el partido parecía ya decidido. A pesar de un disparo al poste del Villarreal en su único acercamiento al área local, el equipo amarillo no parecía en condiciones de discutir la permanencia del Sporting. El tanto de Sergio Álvarez en la segunda mitad era la confirmación de que poco podían hacer el Getafe y el Rayo para evitar que fueran los asturianos los que continuaran un año más en Primera. Sólo el Getafe dependía de sí mismo, pero era incapaz de superar al Betis.

Después del segundo gol, las imágenes de televisión muestran a un empleado del Sporting dando la mano a Uría, el segundo de Marcelino.

El partido terminó así y estalló la locura en El Molinón. La Mareona estaba feliz, con el presupuesto más bajo de Primera competirá un año más con los mejores. «La comunión de los jugadores y la afición es la clave de la temporada», dice Abelardo, el entrenador del Sporting. «Después del nacimiento de mis hijos, el final de la pasada temporada y el de ésta son los mejores momentos de mi vida», añade. El Sporting sigue enganchado a la élite en un año decisivo. Los ingresos por derechos televisivos de la próxima temporada serán muy superiores a los actuales, lo que garantiza la supervivencia del club. «La próxima temporada no habrá restricciones para fichar, pero tras dos temporadas con ellas no sé si sabré hacerlo», bromeaba Abelardo. Sus rivales no estaban para bromas. «Estará contento Marcelino», decía Esnáider, el técnico del Getafe. «No me ha gustado lo que ha pasado en El Molinón», aseguraba el presidente del Rayo, Raúl Martín Presa.