Eurocopa 2016

Gareth contra Cris

Bale y Ronaldo se enfrentan el miércoles en la semifinal. Quizá esté en juego el Balón de Oro. «Esto lo es todo», decía la estrella galesa

Bale celebra la clasificación de Gales a la semifinal
Bale celebra la clasificación de Gales a la semifinallarazon

Bale y Ronaldo se enfrentan el miércoles en la semifinal. Quizá esté en juego el Balón de Oro. «Esto lo es todo», decía la estrella galesa

Bélgica era la favorita de los expertos, el equipo del que se habla poco entre los aficionados, porque no tiene historia, pero que promete mucho entre los que saben. En cambio, de Gales no hablaba nadie. Sin tradición futbolística, se esperaba que luchase por el tercer puesto de su grupo y se despidiese con honra de la Eurocopa. Ahora podría disputar la final. «Esto lo es todo, es una sensación increíble. Confiamos totalmente que podíamos llegar hasta aquí y ahora estamos disfrutando el viaje», contaba después del partido un emocionado Bale, la estrella de los suyos, el futbolista que hace de todo, como dar pases a los delanteros desde el centro del campo. Bale es, además, de los pocos que no tenía planes para estas fechas. Confiaba en estar disputando aún la Eurocopa; alguno de sus compañeros, en cambio, ya tenía reservados estos días para las vacaciones. «Vamos a jugar las semifinales con confianza, no podemos darnos el lujo de pensar más allá», decía Gareth cuando le preguntaron por la final.

Paso a paso: primero Portugal, el miércoles. Primero, Ronaldo, su compañero en el Real Madrid. El equipo blanco puede presumir de tener a los mejores futbolistas de la competición. El partido será un duelo fraticida entre dos compañeros, dos jugadores que se respetan, que no son amigos, pero que saben colaborar para conseguir éxitos cuando comparten camiseta. Ahora les toca medirse en un cara a cara en busca de la final, pero puede que también para encontrar al mejor jugador de este año. El Balón de Oro aún es una quiniela abierta, pero todo importa y más a estas alturas de la Eurocopa, donde se mide no sólo calidad de los futbolistas, también su capacidad para liderar a su equipo en los momentos más complicados.

Ronaldo es el capitán de Portugal, el hombre al que se dirigió su seleccionador para decirle el jueves que tenía que tirar el primer penalti para empezar con buen pie. Bale es el alma de Gales, puede rematar o empezar la jugada. Puede caer a una banda o animar a la grada. Él manda y más en el próximo partido, en el que no estará Ramsey, sancionado por acumulación de tarjetas. «Es una gran decepción pero ha hecho lo que tenía que hacer, lo que necesitaba el equipo. El país está orgulloso, yo estoy orgulloso», decía el técnico, Coleman, del que es uno de sus mejores jugadores.

Sin Ramsey, Bale tiene que comandar a su selección en el partido más importante de su historia. «Todo es muy nuevo para nosotros. La última cita así fue en el Mundial de 1958. No tenemos que olvidar lo que hemos hecho en la competición y ser fieles a nuestra identidad», continuaba Coleman. Y esa identidad consiste en preparar bien las jugadas a balón parado, en creer que todo es posible y en el trabajo solidario: «Hemos estados bien con el balón y hemos defendido cuando tocaba como soldados», explicó Coleman.