Entrenamiento

Fuerza o hipertrofia: esto es lo que tienes que hacer en el gimnasio según tu objetivo

Cada uno de estos tipos de entrenamiento se centra en aspectos diferente del rendimiento muscular

Fuerza o hipertrofia son dos objetivos diferentes en el gimnasio
Fuerza o hipertrofia son dos objetivos diferentes en el gimnasioDreamstime

La mayoría de las personas que acuden al gimnasio entrenan con el objetivo de moverse y evitar una vida sedentaria, perder grasa o ganar músculo, así como sentirse bien con su cuerpo. Pero muchos de ellos se olvidan de buscar un objetivo claro, que repercute sobre el tipo de entrenamiento al que se enfrentan. Entrenar fuerza o hipertrofia son dos conceptos diferentes que algunos desconocen, y aunque sus diferencias son leves, se refieren a un objetivo distinto relacionado con el entrenamiento de resistencia o el levantamiento de pesas.

Y es cada uno de estos tipos de entrenamiento se centra en aspectos diferentes del rendimiento muscular. Mientras que uno se refiere a conseguir tener más fuerza, el otro busca conseguir más tamaño en los músculos.

Fuerza o hipertrofia: qué entrenar en el gimnasio y cómo saber cuál es mi objetivo

La fuerza se refiere a la capacidad de generar tensión muscular para superar una resistencia. Por su parte, la hipertrofia se refiere al aumento del tamaño de las fibras musculares debido al aumento en el volumen celular. Así, ya que son dos conceptos diferentes, también el objetivo es diferente.

Cuando se entrena para la fuerza, el énfasis está en levantar cargas pesadas durante un bajo número de repeticiones (generalmente entre 1 y 6 repeticiones). Muy diferente al entrenamiento para la hipertrofia, el cual se centra en levantar pesos moderados con un rango de repeticiones más alto (generalmente entre 6 y 12 repeticiones).

En el entrenamiento de fuerza, se producen adaptaciones neuromusculares, como una mayor eficiencia en la activación de las unidades motoras y una mejora en la coordinación neuromuscular. Además, puede haber un aumento en la densidad ósea y una mejora en la eficiencia del sistema nervioso central. Por su parte, se produce un aumento en el tamaño de las fibras musculares en el entrenamiento de hipertrofia, así como en la cantidad de proteínas contráctiles. También hay un aumento en el volumen de líquido intramuscular y otras adaptaciones celulares que contribuyen al crecimiento muscular.