Fútbol

Messi y la obsesión de la Champions: “Mi sueño es volver a ganarla y el PSG es el lugar ideal”

El argentino ya sonríe en París. Asegura que tanto él como el club tienen el mismo objetivo: ganar la Orejona

Locura en París por la llegada de Leo Messi. El PSG tiene un equipo de ensueño, tiene a Mbappé, tiene a Neymar... Pero el argentino es otra cosa, o la guinda del pastel para formar un tridente ofensivo espectacular. Los aficionados se han tirado a las calles para jalear a Messi, que vivió un día de locos el martes y el miércoles por fin fue presentado. La cara de Al-Khelaifi, el dueño del PSG, lo decía todo: no cabía en sí de gozo y dijo que con el “Fair Play” financiero no había problema: que caben todos. Habló de un momento “histórico” para el fútbol. La cara de Leo también era de sonrisa después de la llorera por su despedida del Barcelona, donde estuvo 21 años. Pese a que tanto él como su padre sí han mostrado cierto malestar con Laporta, entendiendo que no hizo todo lo posible por renovar a su estrella o que no les dijo la verdad sobre la imposibilidad de hacerlo, las palabras de Messi en París fueron de cercanía con su ex club. “Estoy muy feliz, todos sabéis de mi salida del Barcelona, donde fue muy duro, son muchos años, es difícil el cambio después de tanto tiempo, nada más llegar acá la felicidad es enorme”, aseguró en una conferencia de prensa en la que las dos partes dejaron claro cuál era la meta de esta temporada: proclamarse campeones de Europa. Unas veces lo decían de forma literal y otras lo decían sin decir, refiriéndose a “el objetivo”. Pero Leo fue claro. Después del “quiero seguir ganando” que ya dijo en la Ciudad Condal, afirmó claramente: “Mi objetivo y mi sueño es volver a ganar la Champions y creo que llegué al lugar ideal”, aseguró el jugador. Al Khelaifi al final también acabó reconociéndolo.

Messi tiene cuatro Orejonas, pero la última que ganó fue en 2015, formando parte de otro tridente: con Neymar (con el que ahora se reencuentra) y Luis Suárez. En la primera, en 2006, no pudo participar en la final porque estaba lesionado, aunque sí fue protagonista en la dura eliminatoria de octavos contra el Chelsea de Mourinho. Después llegaron los grandes años con Guardiola en el banquillo, los títulos de 2009 y 2011 con dos exhibiciones ante el Manchester United en Roma y Wembley, despertando la admiración de todo el mundo del fútbol por la manera de jugar, aparte de por los títulos. Con Luis Enrique fue la última y a partir de ahí, el desastre, focalizado fundamentalmente en las debacles de Roma y, sobre todo, Liverpool, donde desperdiciaron el 3-0 logrado en la ida en semifinales.

“La Champions no siempre la gana el mejor. Esto es fútbol. Están los mejores del mundo y la fórmula es estar todos juntos y tener un poco de suerte, o buscarla. Sabemos lo difícil que es, el PSG teniendo un equipazo no lo pudo conseguir “, explicó el argentino. En su camino europeo de esta temporada podría medirse con el Barcelona, lo que consideró por un lado “lindo”: volver al Camp Nou, espera que con público; pero también “raro”: hacerlo con otra camiseta en su “casa”. Leo explicó que fue de gran ayuda para tomar la decisión de ir al PSG que en la plantilla haya amigos como Di María, Paredes o Neymar. También podrá hablar en español con el entrenador Pochettino, con Keylor Navas, Sergio Ramos... La adaptación puede ser rápida. El delantero asegura que está “con más ganas que nunca” y que está deseando “entrenar con los mejores”, aunque no sabe cuándo debutará. “Vengo de jugar la Copa América, tengo que hacer una minipretemporada y hablaré con el cuerpo técnico para ver cuándo es el momento ideal”, reconoció.