Liga de Naciones

Los intocables de Luis Enrique

El partido contra la República Checa demostró que España no es la misma con titulares que con suplentes

Luis Enrique, durante un entrenamiento de la selección
Luis Enrique, durante un entrenamiento de la selecciónPablo García/RFEFRFEF/EFE

«Hay pocos indiscutibles», dice Luis Enrique de los futbolistas que tiene en la selección, pero la realidad es que España no es la misma cuando juegan unos que cuando juegan otros, como se vio en Praga contra la República Checa. El seleccionador hizo ocho cambios y no estaban ni Busquets ni Morata, dos de los jugadores fundamentales para el seleccionador. Para ellos no recorta elogios y, aunque le cueste dar nombres, todos saben que son intocables. Igual que Unai Simón.

«Busco tener tres porteros titulares y creo que ahora mismo los tengo. No tendría ningún problema en que jugara cualquiera de los tres», asegura el seleccionador, pero los hechos demuestran que el único titular es el portero del Athletic Club. Desde que debutó en un amistoso contra los Países Bajos en noviembre de 2020 sólo ha dejado la portería a David Raya en el amistoso de marzo contra Albania en Barcelona y un cuarto de hora a Robert Sánchez en el partido de clasificación para el Mundial contra Georgia.

Por el camino, además, ha acabado con la carrera en la selección de David de Gea, que no ha vuelto a jugar desde el debut de Unai con España. Lo normal es que el portero del United no vuelva a jugar con la selección, al menos mientras Luis Enrique sea seleccionador. No lo llamó para los amistosos de marzo, tampoco lo ha convocado ahora y, salvo cambio drástico, Unai Simón, Robert Sánchez y David Raya serán los guardametas de España en el Mundial.

Unai, Busquets y Morata forman la columna vertebral de España con Laporte, que no ha podido acudir a la llamada de Luis Enrique por lesión. «El míster sabe que lo doy todo por la selección y que estoy muy agradecido por su confianza y sólo puedo agradecérselo y ponerlo todo cada vez que juego, vaciarme en el campo. Su confianza me hace trabajar más fuerte todavía», advertía Morata después del primer partido de esta tanda contra Portugal en Sevilla.

Aunque juega con el 7, el delantero de la Juventus es el 9 de España. Y sólo deja su hueco en el campo cuando el seleccionador quiere jugar con un falso 9 en lugar de con un delantero puro, como sucedió en la semifinal de la pasada Eurocopa contra Italia, o cuando le quiere dar descanso, como en Praga.

Las ausencias de Busquets sólo obedecen al descanso que necesita por los años que lleva jugando al máximo nivel y por los minutos acumulados esta temporada. No hay un jugador más importante que él para el seleccionador, que admite que cualquier otro técnico «lo hubiera puesto los cuatro partidos los noventa minutos». Pero Luis Enrique lo dejó en el banquillo contra la República Checa, aunque recurrió a él en los últimos minutos cuando el partido estaba complicado. Lo considera tan importante que es el único futbolista al que ha admitido que dejaba fuera de una convocatoria para darle descanso.

«Tiene que seguir siendo el líder de la selección porque tiene mucho fútbol. Va a jugar los años que él quiera, va a ser su cabeza la que decida parar. Es un jugador indispensable, importantísimo para nosotros. La mejor versión de la selección necesita a Busquets», admitía Luis Enrique antes de jugar contra Portugal.

Estos tres futbolistas, más Laporte, son los que marcan el nivel de la selección. Casi todos los demás son intercambiables, aunque Jordi Alba es el lateral izquierdo titular y Pedri y Ansu Fati cuando están en plenas facultades físicas también entran en la categoría de imprescindibles para el seleccionador.

Pero ahora mismo no hay ninguno tan indispensable y que rote menos que Gavi, el futbolista al que más elogios dedica el seleccionador. «Si había un jugador convencido en el campo hoy era Gavi», decía después del partido en Praga. «Esa convicción es impagable», reconoce.