Mundial de clubes

Huijsen y diez más

El debut del Real Madrid en el Mundial confirma al internacional español como algo más que un joven prometedor por su seguridad en defensa y por su visión de juego

MIAMI (United States), 18/06/2025.- Mohamed Kanno of Al Hilal (L) in action against Dean Huijsen of Real Madrid (R) during the FIFA Club World Cup 2025 soccer match between Real Madrid and Al Hilal AC in Miami, Florida, USA, 18 June 2025. (Mundial de Fútbol) EFE/EPA/CRISTOBAL HERRERA-ULASHKEVICH
FIFA Club World Cup 2025 - Real Madrid vs Al HilalCRISTOBAL HERRERA-ULASHKEVICHAgencia EFE

Dean Huijsen sólo necesitó dos partidos en la selección para hacerse imprescindible. De la Fuente necesitaba un central izquierdo para ocupar el lugar de Laporte en los cuartos de final de la Liga de Naciones contra Países Bajos y apareció el joven de origen neerlandés para hacerse fuerte ante los pitos de los aficionados del país de sus padres.

En el Real Madrid sólo ha necesitado uno para convencer de que es algo más que un chico con futuro. Algo más que el mejor joven de la Premier, premio al que ha sido nominado por el sindicato de jugadores.

«Primero felicitarles porque es un día para ellos importante, el debutar con el Real Madrid seguro que los marcará. Y bien, me quedo contento porque ellos tienen personalidad, van a ser jugadores muy importantes y el tenerlos con nosotros nos da un salto de calidad importante», decía Xabi Alonso de Huijsen y de Alexander-Arnold después de su debut contra el Al Hilal.

Mientras el Real Madrid sufre la ausencia de un mediocentro que organice el equipo desde la salida de Toni Kroos, Huijsen ofrece una salida limpia del balón desde el fondo y pases entre líneas desde posiciones más adelantadas. Su visión de juego es inusual para un central y ante la aparente fragilidad que anuncian su 1,95 y su extrema delgadez, demuestra resistencia y mucha fortaleza mental.

Huijsen salió reforzado de su estreno como madridista, a pesar de que el equipo de Xabi Alonso se pareció demasiado al de los últimos tiempos de Ancelotti. El nuevo técnico no varió la formación táctica de su antecesor, insistió con Rodrygo y Vinicius arriba y un delantero centro que esta vez no era Mbappé sino Gonzalo.

Sí varió la posición de Bellingham, más centrado, como interior, en lugar de volcado a la izquierda como era habitual como Ancelotti para facilitarle desde ahí la llegada al área.

«La diferencia entre la primera y la segunda parte ha sido el equilibrio con balón. Hemos estado más estables con balón en la segunda parte y hemos tenido posesiones un poco más largas dentro y fuera, sabiendo llegar un poquito más cerca de ellos. En la primera no nos duraba demasiado el balón y a partir de ahí el Al Hilal ha ido cogiendo un poquito más de peso, ha ido cogiendo un poquito más de aire», explicaba Xabi después del partido.

Al Real Madrid le costó dominar el partido en el primer tramo, aunque todo fue aparentemente más sencillo con la entrada de Arda Guler después del descanso. El Real Madrid tenía más y mejor y las ocasiones llegaban. La primera, de Guler, que mandó un remate al larguero.

La idea de Xabi Alonso era presionar más arriba de lo que hacía el Real Madrid hasta ahora. Pero poco a poco se fue hundiendo esa presión. «Nos costaba porque el día estaba para presionar complicado y en la segunda en cambio creo que, a raíz de crecer con el juego ofensivo nuestro, hemos estado mejor. No ha sido suficiente, pero ha sido mejor», admitía Xabi.

«En la primera parte hemos salido a presionar alto, creo que se ha mostrado nuestra intención. Sin embargo ellos, por su gran juego y el calor nos han sabido echar para atrás», confirmaba Gonzalo, el goleador del Real Madrid.

El canterano fue el mejor del partido, pero le faltó la compañía de Rodrygo y de Vinicius, no demasiado brillantes. La titularidad de Rodrygo es una señal de Xabi Alonso de que cuenta con el brasileño, que atravesó un momento complicado en el último tramo del partido. Los dos brasileños fueron sustituidos y Gonzalo fue el único delantero que jugó 90 minutos.

«Es difícil, pero al final es fútbol El calor es para los dos equipos y debemos seguir trabajando», decía Huijsen, que no se esconde ni dentro ni fuera del césped.