Champions League

La UEFA rompe con la tradición e introduce un cambio en el horario de la final de la Champions League

La final de la edición 2025/26 se disputará el sábado 30 de mayo a las 18:00 horas en el Puskás Aréna de Budapest, abandonando el horario tradicional de las 21:00

El actual trofeo de la Champions League
"La decisión tiene por objeto mejorar la experiencia de los días de partido y beneficiar a los aficionados"Getty Images

La UEFA ha anunciado este miércoles un cambio histórico en el horario de la final de su competición estrella. El organismo rector del fútbol europeo ha comunicado que la gran final de la Champions League de la temporada 2025/26, que se jugará el sábado 30 de mayo en el Puskás Aréna de Budapest, dará comienzo a las 18:00 horas. Esta decisión supone un cambio drástico con respecto al horario tradicional de las 21:00 horas que se venía manteniendo en los últimos años.

Según explicó la UEFA en un comunicado oficial, "la decisión tiene por objeto mejorar la experiencia de los días de partido y beneficiar a los aficionados, los equipos y las ciudades anfitrionas". El anuncio se produce horas antes del sorteo de la fase de grupos de la competición, marcando el inicio de la nueva temporada con una de las novedades más significativas de los últimos tiempos.

La explicación de Aleksander Čeferin

El presidente de la UEFA, Aleksander Čeferin, ha argumentado la medida detallando sus beneficios para los aficionados. "Si mientras el inicio a las 21:00 HEC es adecuado para los partidos entre semana, un inicio más temprano el sábado para la final significa que terminará antes, independientemente de la prórroga o los penaltis", afirmó el máximo responsable del fútbol europeo.

Čeferin añadió que el nuevo horario "ofrece a los aficionados la oportunidad de disfrutar del resto de la noche con amigos y familiares, reflexionando sobre el partido de la temporada". Con esta modificación, la UEFA busca adaptar su evento final a un horario más familiar que mejore la experiencia global para los miles de seguidores que acudirán al estadio y los millones que lo seguirán a través de las televisiones de todo el mundo.