La pareja de moda

Lucas Vázquez y Asensio, otra vez protagonistas en la Champions. El gallego fue la sorpresa en el once titular y acabó como lateral. «Marco hizo otra vez la diferencia», dice Zidane

Se han hecho mayores y su paso adelante en importancia dentro de la plantilla es evidente. Zidane quiere a Lucas y Asensio para los días grandes, aunque esto suponga que tenga que dejar en el banquillo a uno o dos de los pesos pesados. Y ambos responden y dan la razón a su entrenador cada vez que solicita su presencia, por muy enorme que sea el rival. El extremo gallego está en forma, es valiente, trabaja hasta el desmayo y se entiende bien con Cristiano. Razones suficientes para que fuera titular en París ante el PSG, repitiera ayer en el infierno alemán y jugara los minutos más importantes en el doble enfrentamiento ante la Juventus. Contra los italianos no comenzó ninguno de los choques, pero en la vuelta disputó la mitad y en la ida apareció la última media hora para participar en los goles que certificaron la goleada.

Para empezar a derrotar al Bayern, Zizou volvió a tirar de personalidad en favor de uno de sus chicos. Benzema, suplente y Lucas, al campo para completar el centro del campo y pegarse a la banda derecha. Por ese costado trabajó siempre, mucho rato ayudando a Carvajal y ocupando el lateral cuando el «2» se lesionó. Ribery hacía daño por allí, pero no lo tuvo más fácil sin el especialista en el puesto delante. Lucas cumplió más que de sobra y contuvo al francés como si lo hubiera hecho toda la vida.

Era su cuarta titularidad este año en la Liga de Campeones, algo que no había conseguido en las temporadas anteriores. También arrancó uno de los partidos ante el Apoel y otro frente al Dortmund en la fase de grupos, para completar su crecimiento con su aparición en dos días en los que la pelota quema de verdad. El curso pasado sólo lo fue dos veces y ninguna cuando llegaron las eliminatorias. En la temporada 2015-16, en otro par de ocasiones tuvo la condición de titular, una en los grupos y la otra en la ida de las semifinales frente al City.

Asensio tuvo que esperar al descanso para aparecer en escena, pero como en la vuelta ante la Juve, fue el primer movimiento del técnico para solucionar lo que no iba bien del todo. Quería Zizou cuatro centrocampistas en línea y a sus dos chicos pegados a las bandas. Y los dos se encargaron de crear la jugada del segundo tanto con la ayuda involuntaria de Rafinha. Un error del defensa, la galopada de Lucas y Marco y un sutil remate del mallorquín. Ellos, junto con Cristiano, están llevando hacia adelante al Madrid en Europa. Se han ganado que Zidane cuente con ellos y lo hace sin complejos: «Ha trabajado muchísimo, su partido ha sido enorme y ha acabado de lateral. Con la ayuda de Modric, ha controlado a Ribery», decía Zizou de Lucas. «Es increíble. De todas formas, no es una novedad. Hace la diferencia, es vertical, tiene velocidad y pegada. Un poco de todo», remataba respecto a Asensio, que se ha acostumbrado a ser rotundo en el Allianz Arena. El año pasado entró por la lesión de Bale y dio un pase de gol a Cristiano. Ayer, ejecutó a Ulreich picándole el balón en el 1-2. Son la pareja de moda de esta Champions. «Jóvenes, pero una realidad», según Ramos.