MotoGP

Rossi carga contra Márquez: «Tengo miedo a estar con él en pista»

Márquez tiró a Rossi y el italiano no se mordió la lengua. «No hice nada de forma voluntaria. Él también ha tenido 25 años», dijo Marc

El piloto británico Cal Crutchlow durante las pruebas libres del Gran Premio de Argentina de Motociclismo
El piloto británico Cal Crutchlow durante las pruebas libres del Gran Premio de Argentina de Motociclismolarazon

Márquez tiró a Rossi y el italiano aseguró que siente miedo de estar con él en pista. «No hice nada de forma voluntaria. Él también ha tenido 25 años», dijo Marc.

¡Boooom! La guerra volvió a estallar en MotoGP. Márquez lanzó ¿una bomba en Argentina que Rossi no va a dejar pasar, porque la herida de la polémica de la famosa patada de Malasia en 2015 sigue abierta y, tras lo de ayer, puede que jamás deje de sangrar. Todos los astros se alinearon para que el 8 de abril de 2018 no fuera un día cualquiera y sí uno de los que jamás se olvidan y con unos efectos colaterales de efectos imprevisibles. Una serie de desgracias permitieron que apareciera la versión más descontrolada de Marc encima de la moto y, después, el que se mostró desencadenado ante los micrófonos fue Valentino. «No acepto sus disculpas y lo único que quiero es que no vuelva a mirarme a la cara. La relación con él es la última de mis preocupaciones. Tengo miedo de estar con él en pista. Va a por mí especialmente», lanzó el italiano después de que los motores se apagaran. «No he hecho nada de forma voluntaria ni he ido a por nadie. Sólo quería ir hacia arriba. No voy a contestar a sus palabras. Creo que él también ha tenido 25 años», se defendía Márquez.

Le pasó de todo al español, que se sentía tan superior durante el fin de semana que no pudo pararse a pensar en ningún momento. La lluvia hizo que el inicio se demorara y, cuando se dio por fin la salida, su Honda se apagó por un fallo eléctrico. El comisario no lo llevó al «pit lane» y le dejó que la arrancara y volviera a su lugar. Para ello tuvo que conducir hacia atrás unos metros, lo que le costó un paso por la calle de boxes. Esto le llevó a la parte trasera del grupo y desde allí comenzó una alocada remontada. «Es verdad que lo di todo, fui al cien por cien y también es cierto que la pista estaba muy peligrosa, en seco no hubiera pasado nada», explicaba.

Tocó a Aleix Espargaró por detrás y llegó la segunda penalización: dejarse adelantar por el de Aprilia. Lo hizo y siguió su escalada, sin aflojar, como si el Mundial acabara mañana cuando en realidad quedan 17 de 19 Grandes Premios. No quería irse de vacío de un sitio que le era favorable, se las apañó para llegar hasta Dovizioso, al que superó, y llegó a la altura de Rossi. Choque de placas tectónicas que dio lugar al terremoto. Lo intentó por dentro Marc, tocó con la pierna de «Vale» y éste se fue al césped y al suelo. Volvían los recuerdos de Malasia 2015, de la patada y de todo lo que vino más tarde, incluido el recurso al Tribunal de Arbitraje de Suiza.

Dirección de carrera reaccionó con un castigo de 30 segundos, que devolvía a Marc al puesto 18, es decir, sin puntos, pero con una guerra abierta con Rossi. Acumuló munición el «46» y la soltó toda cuando se encendieron las cámaras: «Nunca tiene respeto por su adversario, ha chocado con cuatro pilotos distintos. Siempre te da de lleno y sabe que así él no se cae. Esto no puede ocurrir. Hace que este deporte sea peligroso. Los demás también tenemos pelotas para hacerlo...». La venganza se sirve fría y la de 2015 ya está en el plato. Rossi, junto a su amigo Uccio, no aceptó el perdón que Marc buscó en el box de Yamaha. «Vete a cagar», le dijeron, algo que el español aceptó. «Va a destrozar nuestro deporte. No creo que sea inconsciente, es mala fe», machacaba Valentino de manera excesiva. Marc insistió en que no hubo mala fe y que sólo quería remontar. La guerra entre los dos gigantes ha regresado.