La última de Djokovic: comparte mesa con un paramilitar que participó en la masacre de Srebrenica

Novak Djokovic sigue generando polémica más allá de las pistas. Después de perder la final del Abierto de Estados Unidos ante Daniil Medvedev, el serbio ha decidido tomarse una tregua y no tiene fecha definida para regresar al circuito. En este periodo vacacional ha acudido a Bosnia-Herzegovina y allí han surgido los problemas. Han aparecido unas imágenes en las que Nole aparece con un líder serbio que participó en el genocidio de Srebrenica en el que las fuerzas militares y paramilitares serbias acabaron con la vida de más de 8.000 bosnios.

La imagen fue tomada el pasado día 18 y Djokovic aparece junto a Milan Jolovic, ex comandante de la unidad paramilitar conocida como los “Drina Wolves” (”Los Lobos de Drina”), un grupo de los más activos en la masacre de la localidad bosnia. A Jolovic se le conoce por el sobrenombre de “Leyenda” porque fue uno de los responsables de salvar la vida al ex general serbobosnio Ratko Mladic, que fue condenado por genocidio y crímenes de guerra en 2017. Jolovic es un negacionista de la matanza de Srebrenica. Además Djokovic también compartió espacio con el líder serbobosnio Milorad Dodik, que exige la independencia de la República Srpska, territorio en bosnia que cuenta con una mayoría de población serbia.

El periodista bosnio Dragan Bursac ha resumido así las peculiares vacaciones del ganador de 20 “Grandes”: “Djokovic podría haber sido el mejor de todos los tiempos, representar a todo el planeta y ayudar de mil millones de formas. Sin embargo comparte condecoración con los criminales de guerra Radovan Karadzic y Ratko Mladic, canta en la boda de los Dodik y come con los militares que organizaron el genocidio. Podemos decir que el mejor tenista del mundo, fuera de las pistas de tenis actúa como el ministro del Interior de Serbia”.