El salvaje punto de Nadal para rendir definitivamente a Khachanov en Australia (vídeo)

Karem Khachanov se lo empezaba a poner difícil a Nadal. Pero entonces sucedió esto:

La mejor manera que tuvo el español de frenar la reacción del ruso fue con uno de los golpes marca de la casa. Estaba el ruso sirviendo como los ángeles y en una bola de break del cuarto set iba a hacer una jugada de manual: saque abierto y derecha al otro lado. Lo hizo perfecto, pero Rafa logró restar como pudo y salió disparado al otro lado de la pista para lograr un passing de revés en carrera. Lo suele hacer mucho por el otro lado, con la derecha, pero esta vez lo hizo con su tiro a dos manos.

Así enderezó un partido que se le estaba complicando y que terminó llevándose por 6-3, 6-2, 3-6 y 6-1. “Creo que ha sido mi mejor partido desde que volví”, dijo el balear, que sigue buscando sensaciones después de unos meses en los que no lo ha pasado muy bien. El parón por la lesión en el pie izquierdo que le sigue dando la lata (”No tiene solución”, llegó a decir), el covid que casi altera todos los planes... Pero se recuperó a tiempo y pudo seguir el plan.

Disputó el ATP 250 de Melbourne y se llevó el triunfo, y sigue su firme camino en el Grand Slam que sólo ha ganado una vez, pero que tampoco se puede decir que se le haya dado mal. Si se piensa eso es porque se trata de él. En sus quince últimas ediciones ha llegado al menos a los cuartos de final en todas menos en dos: la de 2013, en la que no jugó; y la de 2016, cuando le sorprendió Fernando Verdasco en la primera ronda. El curso pasado los cuartos fueron su límite. Cayó ante Tsitsipas en un partido en el que el griego le remontó dos sets. Ahora está en octavos y hará frente al vencedor del Karatsev-Mannarino. Si pasa ese duelo, que será muy exigente, seguramente tendría la prueba definitiva para saber dónde está de verdad y para convencerse de que este puede ser su año en Melbourne. Su teórico rival en esa antepenúltima ronda sería Zverev, al que todos señalan como uno de los favoritos junto a Medvedev. Son los dos tenistas que más han ganado los últimos meses, en los que Rafa estaba de baja. La ausencia de Djokovic en Australia y el tiempo de inactividad del español hace que se piense en ellos como los principales aspirantes. Pero contra Nadal en esa segunda semana nadie se fía...