Tenis
Final en familia en Shanghái: Rinderknech vence a Medvedev y peleará por el título con su primo Vacherot
Vacherot lloró en la grada con el triunfo de su primo (4-6, 6-2 y 6-4), que será su rival, y después bajó a la pista a abrazarlo
La final del Masters 1.000 de Shaghái será un partido en familia para Arthur Rinderknech y Valentin Vacherot. El primero es francés y tiene 30 años, el segundo es monegasco y tiene 26, pero son primos hermanos, tienen una gran relación y van a pelear por levantar el primer título de su carrera, además de mucho nivel: la categoría más importante después de los Grand Slam.
El último en completar la hazaña fue Rinderknech, que remontó a Daniil Medvedev (4-6, 6-2 y 6-4) en su semifinal para hacer realidad el sueño. En la grada estaba Vacherot y su reacción no pudo ser más significativa. Mientras su primo se tiraba por el suelo tras la doble falta del ruso que le dio la victoria, él se llevó las manos a la cabeza y no pudo evitar llorar.
Después, pasó al palco del francés y se abrazó con su entrenador. E incluso saltó a la pista, para protagonizar otro abrazo entre los finalistas.
Unas horas antes, Vacherot había dado la sorpresa derrotando a un mermado Novak Djokovic por 6-4 y 6-3. El mensaje que dejó escrito en la cámara fue dar ánimos a Rinderknech. “El chat de WhatsApp familiar está que arde”, había comentado durante la semana el galo. Lo que en principio parecía casi una broma, lo de disputar la final entre primos, se ha ido haciendo realidad y entre ellos se han ido animando. “No estoy acostumbrado a mirar a alguien y querer que gane con tantas ganas”, confesó Rinderknech, y desveló también que pasaban juntos las vacaciones.
En el caso de Arthur, es un tenista ya habitual en el circuito ATP. No ha ganado nunca un título, pero fue finalista en Adelaida 2022 y tiene tres triunfos sobre “top 10”. Al llegar a este último partido se ha asegurado el mejor ranking de su carrera, el 28. Si lo gana será el 22. En Shanghái ha logrado una de esas victorias contra los diez mejores: superó a Zverev en segunda ronda. Antes, venció a Michelsen; y después, a Lehecka, Félix Auger-Aliassime y Medvedev.
Lo de Vacherot es todavía más sorprendente, pues partía como el 204 del mundo. Con esta hazaña sube al 58, y si levanta el título, al 40. De hecho, viajó a Shanghái sin saber si iba a poder jugar la previa, pero las bajas le permitieron hacerlo. La superó, y ya en el cuadro final se ha impuesto a Bublik, Machac, Griekspoor, Rune y la gran campanada contra Djokovic.
Rinderknech ganó a Medevedev, y escribió en la cámara: “Y ahora, ¿qué?”. En la entrevista al vencedor, dijo: "Ni siquiera puedo decir que fuera un sueño. No creo que nadie en nuestra familia lo haya siquiera soñado. Es sólo un sueño que surgió de la nada y empezamos a creerlo quizás en cuartos de final. Pensé: '¿Quién sabe? Es muy difícil. Quizás uno o dos puedan retirarse. Lo que sea que pase'. Ahora estamos aquí. Hemos peleado tantos partidos. De alguna manera, los dos estamos de pie al final. Simplemente increíble”.