Autónomos

¿Qué estresa a los autónomos españoles?

6 de cada 10 propietarios de un pequeño negocio sufren de estrés y más de la mitad cree que la falta de recursos económicos es la fuente de sus problemas

Mantener una rutina de descanso durante la jornada laboral es esencial para mantener el estrés laboral a raya | Fotografía de archivo
Mantener una rutina de descanso durante la jornada laboral es esencial para mantener el estrés laboral a raya | Fotografía de archivolarazon

Sin recursos, sin financiación, sin tiempo para su vida personal y sin saber si tendrán que cerrar en cualquier momento. Los pequeños comercios luchan por sobrevivir en un entorno cada vez más hostil, donde sus competidores, las grandes cadenas, les ganan terreno en cada esquina. Llevar adelante un pequeño negocio genera estrés a 6 de cada 10 propietarios en España. De ese 61,2%%, el 19,59% aseguró que sufre “mucho estrés” y el 41,63% lo calificó de estrés moderado, según un estudio realizado por los analistas de UENI para conocer la salud mental de los pequeños comerciantes.

España ha perdido de media 23 comercios al día en los últimos cuatro años, con un descenso del 4,2% de los autónomos que se dedican al comercio, informó ATA en diciembre de 2019. El comienzo de 2020 tampoco fue el mejor. “Con las perores cifras de afilación desde el año 2013”, las pymes españolas no pueden avanzar ni implementar mejoras en sus negocios debido a las restricciones financieras y la falta de recursos económicos. De acuerdo con el Observatorio de Competitividad empresarial, “la falta de recursos es, sin lugar a dudas, la principal barrera para que las empresas españolas no innoven”, señala el estudio de UENI. Después de la falta de recursos económicos (53%) y de no tener tiempo para su vida personal (40,23%), el estrés entre los pequeños empresarios, autónomos y emprendedores está relacionado con el miedo a que cierre su negocio (26,82%) y la falta de financiación (23,76%), en tercer y cuarto lugar, respectivamente. Le siguen los trámites burocrático (19,54%) y el clima político (8,55%). No solo los cierres de negocio impactan en la economía. La “enfermedad del siglo XXI” según la OMS, el estrés, también repercute en los gastos sanitarios. “Fatiga inusual, migrañas, trastornos del sueño, baja autoestima, cambios de humor y desgaste metal son los patologías que han sido diagnosticadas en muchos empresarios de todo el mundo”, señala el informe.

Los pequeños comercios sufrían en 2019 y agonizan en 2020. Según ATA, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) ha perdido, nada más en el mes de enero, a 17.969 trabajadores por cuenta propia. “El estrés entre los miembros de este sector es latente y significativo”, lamenta el estudio. Los comercios resultaron ser los más afectados por el miedo a que cierre su negocio (41,18%). Finalmente, el clima político, que si bien de manera global fue la opción menos elegida por los encuestados, sí afecta al 8,55% de los microempresarios que la eligió como detonante de su estrés. El sector de los alimentos y el gran consumo ha sido el más afectado por esta causa (17,65%). En este apartado, los pequeños comerciantes de Andalucía, Canarias y Cataluña son los más intranquilos, frente a los murcianos, extremeños y castellanoleoneses, que muestran la menor preocupación.