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El Estado deja de ingresar 7.000 millones al año solo en impuestos por no extender los peajes a todas las autopistas

Ábalos presenta hoy la Estrategia de Movilidad del Gobierno, que pone sobre la mesa el debate sobre la cuestión

Imagen de un cartel de la R3 en el que se lee la palabra Peaje
Imagen de un cartel de la R3 en el que se lee la palabra PeajeJesus G. FeriaLa Razón

No es popular, ningún gobierno se ha atrevido a hacerlo pero desde diferentes ámbitos -y no sólo el propio sector, parte interesada- se viene abogando por la implantación de peajes en todas las vías de gran capacidad españolas. Ahora mismo, sólo se paga en un 20% de las mismas. Pero si se extendiera el pago por uso al resto de la red, el Estado podría ingresar entre 6.000 y 7.000 millones anules, según los cálculos de Abertis, la principal compañía concesionaria del mundo por kilómetros gestionados. La cifra la ha ofrecido hoy su consejero delegado, José Aljaro, que considera que sería una buena medida para impulsar la economía española ahora que la crisis del coronavirus ha dejado a España con las cuentas públicas tiritando.

Aljaro ha propuesto que se abra un proceso concesional que permita que los adjudicatarios paguen al Estado para poder gestionar esas autovías por un periodo entre 25 y 30 años. “Podemos hablar de un monto que puede rondar los 100.000 millones de euros, hablamos de unas cifras muy importantes”, ha subrayado durante su intervención en el Foro Tendencias. Aljaro ha explicado que los usuarios pagarían “unos pocos céntimos por kilómetro” por el uso de esas autovías y, además, se bonificaría el uso frecuente para aquellos que la utilicen de forma diaria.

Bueno para España

El directivo de Abertis ha añadido que la medida tendría también ventajas fiscales, ya que las compañías adjudicatarias generarían impuestos como el IVA o el impuesto de sociedades, al tiempo que generan puestos de trabajo. “Es bueno para España y socialmente justo que pague el que usa”, ha apuntado Aljaro, que ha advertido al Gobierno de que tiene la responsabilidad de aceptar proyectos que ayuden a la sociedad y la economía española aunque tengan “un cierto coste político”, como ocurriría con la generalización de los peajes en las autopistas.

El pronunciamente de Aljaro coincide con el día en que el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, va a presentar Estrategia de Movilidad, Segura, Sostenible y Conectada 2030con la que el departamento pretende dar “un nuevo enfoque en las políticas y su planificación” al sistema de transportes español. Entre el paquete de propuestas que el plan pondrá encima de la mesa está el debate en torno a la fiscalidad y los modelos de gestión y financiación de las carreteras estatales. Es decir, la conveniencia o no de extender los peajes a todas las carreteras de gran capacidad. Desde hace tiempo, Ábalos viene advirtiendo de que las arcas públicas están muy tensionadas y de que hay que tomar una decisión sobre si seguir conservando estas carreteras con cargo a los Presupuestos o implantar peajes. Una filosofía, la del pago por uso, que entronca con la filosofía que defienden desde Bruselas de que el que contamina, paga. El problema, como ha deslizado Aljaro, es que ningún partido quiere asumir el coste que tendría aprobar una medida tan impopular como ésta, por lo que Ábalos lleva tiempo tratando de alcanzar un acuerdo que reparta el coste entre todos los partidos.