OCDE

Cerco fiscal a los gigantes tecnológicos

La OCDE se inclina por gravarlos de forma consensuada por el beneficio que generan en los países en los que operan

Amazon apenas pagó 864.000 euros en 2016 por el impuesto de sociedades
Amazon apenas pagó 864.000 euros en 2016 por el impuesto de sociedadeslarazon

La OCDE se inclina por gravarlos de forma consensuada por el beneficio que generan en los países en los que operan.

El Ministerio de Hacienda y Función Pública mantiene en el punto de mira a las grandes empresas tecnológicas y extremará el celo para que tributen por los beneficios y el consumo que generan en nuestro país. De hecho, ha llegado a contemplar, como otros países, la posibilidad de poner en marcha un impuesto exprés de carácter temporal para empresas como Amazon, Google o Apple, en espera de que la OCDE decida el marco fiscal aplicable a estos gigantes. Sin embargo, ha decidido esperar a que el organismo internacional finalmente se pronuncie. Ayer, la subdirectora general de Fiscalidad Internacional y presidenta del Foro de Transparencia Global de la OCDE, María José Garde, avanzó la posibilidad de establecer ese tributo temporal durante su intervención en una jornada sobre fiscalidad internacional en 2018, organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección y PWC.

Según dijo, la OCDE va a presentar un informe en abril al G-20 sobre la economía digital cuyo primer borrador presentará en marzo, y del que se desprende que hay «apetito» por gravar de forma consensuada y a nivel internacional el beneficio que generan las empresas tecnológicas en los distintos países en los que operan. Garde indicó que, hasta que se produzca el acuerdo, algunos Estados como España buscan mientras tanto fórmulas para establecer algún tipo de imposición temporal.

Por su parte, el director general de Tributos, Alberto García Valera, subrayó que se espera conocer en fechas «muy tempranas» el informe intermedio sobre el que se está trabajando a nivel internacional en materia de economía digital para un esquema permanente, aunque precisó que se contemplan soluciones «a corto plazo» para abordar la tributación de las operaciones que se desarrollan en ese entorno.

A pesar de estas declaraciones, un portavoz del Ministerio de Hacienda aclaró que en estos momentos no se está estudiando crear una figura impositiva de carácter temporal para gravar a las grandes corporaciones tecnológicas. Según las mismas fuentes, España se mantendrá a la espera de las indicaciones de la OCDE en este sentido.

Estas declaraciones concuerdan con las formuladas la pasada semana por el propio presidente, Mariano Rajoy, quien se refirió al asunto de la tributación de las empresas en la era digital como uno de «los grandes retos del futuro» y defendió que estas grandes corporaciones tecnológicas «deben pagar sus impuestos allí donde obtienen sus beneficios, se llamen Amazon o como quieran llamarse». No obstante, indicó que este asunto no lo puede abordar un país en solitario, sino a nivel europeo, recordando que los socios europeos ya han pedido a la Comisión que estudie esta cuestión en serio.

En España, la Agencia Tributaria incluye el control de la actividad de estos gigantes en sus planes de inspección. Uno de sus objetivos es la investigación de los casos en los que se ponga de manifiesto el doble aprovechamiento de pérdidas o gastos para tributar menos. En 2016 llegó incluso a registrar la sede de Google en la Torre Picasso de Madrid y el campus Google Madrid, un centro de startups que mantiene la compañía, en busca de indicios de un posible fraude y evasión fiscal en el pago del IVA y del impuesto a no residentes. En el año fiscal de 2015, Apple declaró una facturación en nuestro país de 332 millones de euros, mientras que Google declaró en 2016 una cifra de 92,3 millones. Por su parte, Amazon apenas pagó 864.000 euros en 2016 por el impuesto de sociedades.