Los empresarios quieren la gran coalición

La CEOE exige la formación de un gobierno en un mes. Antonio Garamendi reclama un pacto de Estado a los dos partidos mayoritarios, PSOE y PP. Los autónomos solicitan que cumplan las promesas electorales al sector

«Ha llegado el momento de la responsabilidad política y de la visión transversal para poder conformar cuanto antes un Gobierno estable y moderado». Así se claro y contundente se mostró ayer el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, que pidió a los dos grandes partidos «sentido de Estado», porque España «necesita estabilidad para los próximos cuatro años». A los empresarios no les gusta la incertidumbre, la inconcreción ni la inestabilidad. Por eso han tomado con preocupada expectación los resultados electorales del 10-N. Sus concluciones son claras: la situación de bloqueo no ha desaparecido, la influencia independentista en la política nacional ha ganado terreno y el temor a una nueva parálisis institucional ensombrece el futuro inmediato. Ante esta tesitura, la patronal pide que los dos partidos más votados, PSOE y PP, alcancen un acuerdo para una gran coalición que evite que los extremos del arco político, representados por VOX, Podemos y el independentismo, marquen la agenda del nuevo curso. Garamendi ha marcado «en un mes» el plazo máximo para que esté conformado un Ejecutivo estable, y ha apelado a la responsabilidad de los políticos para que «apliquen el diálogo social» y empiecen a hablar.

En este sentido, les ha pedido que pongan sobre la mesa la responsabilidad que se presume de sus cargos. «Es el momento de las grandes responsabilidades y de tomar decisiones de la mano del diálogo social, el cauce por el que deben transcurrir las próximas iniciativas legislativas en busca del mayor consenso posible», explicó a través de un comunicado. El presidente de la patronal entiende que ha llegado el momento de los pactos. «Las empresas y la sociedad española no se pueden permitir unas nuevas elecciones y necesitan, desde el rigor presupuestario y la ortodoxia económica, avanzar en las reformas pendientes», que ha enumerado en formación, innovación, digitalización, pensiones, internacionalización, sostenibilidad, una nueva y competitiva tributación, unidad de mercado y un plan real y de futuro para la industria. «Ya se lo hemos traslado a todas las fuerzas políticas en los últimos días y es lo que necesitamos».

En la misma línea se posicionó ayer la principal patronal catalana, Foment del Treball, que instó a Pedro Sánchez a buscar las alianzas necesarias para formar un Ejecutivo «estable y moderado» que firme un compromiso con la gobernabilidad de España «ante el contexto de fragmentación parlamentaria», explicó en su comunicado.Este complicado escenario político hace que su presidente, Josep Sánchez Llibre, haya ofrecido su mediación para lograr «con urgencia» la posibilidad de un pacto para que «el partido más votado» busque las alianzas que permitan forman un Gobierno «estable y moderado» para impulsar también «las reformas ya concertadas entre el Ejecutivo y los agentes económicos y sociales», porque, afirmó Sánchez Llibre, lo que está en juego es «el crecimiento económico y la competitividad empresarial».

El dirigente patronal fue más allá y consideró «imprescindible» que los partidos mayoritarios acuerden «con urgencia» una nueva Ley de Presupuestos que «dé estabilidad y rigor al nuevo Gobierno salido de los pactos». Foment subrayó también que España ha mostrado indicadores económicos positivos, a pesar del contexto europeo de desaceleración, y que esto ha sido posible gracias al hecho de que «el clima de diálogo y concertación social entre los agentes sociales ha sido fundamental y ofrecemos toda nuestra colaboración ante el nuevo escenario político, en el que más que nunca es imprescindible la moderación y el pacto».

Tampoco difieren mucho a los anteriores los planteamientos de los autónomos. La asociación ATA pidió directamente al presidente del PP, Pablo Casado, que fuerce la abstención de sus diputados para que facilite un Gobierno del PSOE a través de «un gran acuerdo de las fuerzas moderadas y constitucionalistas» y evitar que se repita «un escenario político de ingobernabilidad como el vivido los últimos tres años». Por ello, exige a los dirigentes «diálogo, estabilidad y moderación» y recordó al máximo responsable del PP la abstención de los socialistas en el año 2016. «Pensar lo contrario no es responsable».

Eduardo Abad, presidente de los autónomos de UPTA, se mostró más exigente con la vía de la gran coalición y exigió que se lleven a cabo las reformas prometidas para el sector. «Los políticos deben anteponer los intereses de los ciudadanos a los suyos y conformar un Gobierno que evite volver a celebrar unas elecciones. Bajo ningún concepto los autónomos aceptaríamos que esta vez no haya un acuerdo. Eso sí, las modificaciones del ordenamiento jurídico de los trabajadores por cuenta propia debe marcar la primera plana de desarrollo de las decisiones del futuro Ejecutivo».

Una posición más ideológica fue la marcada por los sindicatos. Al secretario general de CC OO, Unai Sordo, solo le vale «un acuerdo de izquierdas y plurinacional». Para el dirigente sindical «es hora de la normalización democrática». También pidió romper «el bloqueo institucional y político que vive Cataluña desde hace demasiados años y buscar una salida negociada». Por su parte, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, consideró que el resultado electoral abre «una segunda oportunidad para la izquierda del progreso», pero ha pedido a los responsables políticos «menos tacticismo y pensar más en los problemas verdaderos del país».