Economía

Razones por las que te pueden descartar de un proceso de selección

La identidad digital o marca personal aporta más información sobre un candidato que cualquier currículum. De ahí la importancia de cuidar nuestra presencia en la red

Razones por las que te pueden descartar de un proceso de selección
Razones por las que te pueden descartar de un proceso de selecciónlarazon

Las redes sociales se han convertido en el escaparate perfecto en el que los reclutadores buscan al candidato adecuado. Por eso es importante cuidar la imagen que proyecta nuestro perfil en estos medios. La identidad digital, también conocida como marca personal, aporta más información sobre un candidato que cualquier «currículum vitae». El 81% de las organizaciones reconoce consultar las redes sociales de los profesionales preseleccionados antes de tomar una decisión de contratación, mientras que dos de cada diez han seleccionado a algún candidato por su actividad en redes. Un 34% de los reclutadores reconoce haber desestimado la candidatura de algún aspirante a un puesto de trabajo. Hacer apología de cualquier tipo de violencia o discriminación (72%), promover el consumo de alcohol o drogas (72%) y el uso de imágenes poco apropiadas (69%) son los aspectos que más influirán en un reclutador para rechazar a un postulante. Son datos extraídos del informe «Talento Conectado» elaborado por EY junto a Infoempleo.

Mayor profesionalidad

El 79% de los profesionales de selección opina que los candidatos no trabajan de forma adecuada su marca personal en redes sociales. El 82% de los departamentos de recursos humanos sugiere que los candidatos deberían presentar de forma más profesional sus perfiles para hacerse más atractivos. Un 67% que deberían utilizar palabras clave para encontrarlos más fácilmente cuando se hacen búsquedas de candidatos pasivos, mientras que un 34% opina que tendrían que utilizar imágenes más profesionales.

Indudablemente, las redes sociales tienen cada vez un mayor peso en la sociedad y se están haciendo un hueco en muchos sectores. El sector del empleo no es una excepción, señala Nilton Navarro, «social media manager» de Infojobs. Según datos de este portal de empleo, el 50% de las empresas españolas afirma que consulta las redes sociales de los candidatos antes de tomar la decisión de contratarlos. «Las empresas recurren cada vez más a diversas fuentes más allá del currículum para completar información sobre el candidato. Un hábito que crece en compañías de entre 10 y 49 empleados (53,5%), mientras que en las grandes empresas –de 50 empleados o más– es menos frecuente y solo un 42% declara revisar las redes sociales. Vale destacar también que el 22% de los reclutadores reconoce haber descartado a un perfil que de primeras les había gustado tras ver la información publicada en sus redes», explica Navarro.

La huella digital

Por tanto, si bien las redes no son un factor determinante a la hora de contratar a un candidato sí lo son a la hora de descartarle. «Todo deja marca, lo que hacemos y decimos, pero también lo que no hacemos y callamos. A los reclutadores les molesta el exceso de ruido, pero también el defecto», apunta Guillem Recolons, experto en marca personal. «No significa que debamos dedicarle cinco horas diarias a la red, pero no sería mala idea incluir el hábito de pasarse, por lo menos, una vez al día para interactuar con las distintas audiencias. Acordarse de Santa Bárbara (los reclutadores) solo cuando truena no es solución. Nuestra marca personal es un goteo, es como respirar, una vez somos conscientes de su importancia y arrancamos con un plan, no debería haber pausas. Deberíamos preocuparnos más de nuestra carrera cuando las cosas van bien y tenemos más puertas abiertas», aconseja Recolons.

La promoción interna, los portales web de empleo y los contactos personales son las herramientas de intermediación laboral mejor valoradas por las empresas, todas ellas con puntuaciones superiores a 6. En el lado contrario se encuentran los servicios públicos de empleo, que repiten suspenso y se mantienen como la herramienta menos efectiva para los reclutadores. En el plazo de dos años, los mecanismos de intermediación laboral más utilizados por las empresas serán los portales web de empleo (97%), los contactos personales (96%), las redes sociales (91%), seguidos muy de cerca de las web corporativas (89%) y las candidaturas espontáneas (85%). Los anuncios en medios de comunicación serán el canal al que el 61% de las empresas renunciarán en un futuro próximo.

Todavía un alto porcentaje de empresas (67%) está poco o nada de acuerdo en que el reclutamiento en redes eliminará cualquier otra forma de selección, mientras que un 33% sí está de acuerdo. «Un reclutador online no cierra un proceso en la red; es un apoyo pero es muy difícil tomar una decisión sin una entrevista, algún test competencial o de valores. Por otro lado, el “executive search”, entendido como la búsqueda de perfiles muy altos en organigramas directivos, sigue su curso sin apenas influencia en internet», explica Recolons.

Marco Laveda, «managing director» Spain&Portugal en Robert Walters, sostiene que estar fuera de internet es estar «invisible» para los reclutadores. Pero, a pesar de que siguen ampliando su hegemonía en el sector del reclutamiento, las redes sociales tendrán que evolucionar hacia la especialización. «Según crece su protagonismo, también lo hace el volumen de información sin interés. Si las redes sociales son capaces de adaptar sus formatos, podrían convertirse en los únicos escaparates del mercado laboral, si no, otros más eficientes acabarán llegando».

Pero encontrar al candidato ideal no es solo una cuestión de cómo éste cuide su imagen en la red. También las empresas tienen que hacer lo mismo. El 96% de ellas reconoce que proyectar una buena imagen de empleador es muy importante para atraer el mejor talento, un punto más que hace un año. Ocho de cada diez son conscientes, además, de que pueden estar perdiendo un cliente actual o potencial, cuando la experiencia del candidato a lo largo del proceso de selección no es satisfactoria.