Elecciones Generales 2016

A por Rajoy para parecer alternativa

A por Rajoy para parecer alternativa
A por Rajoy para parecer alternativalarazon

La campaña del PSOE ha comenzado a medio gas. Pedro Sánchez ha ideado un arranque tranquilo con huecos libres que le permitan preparar a conciencia el debate a cuatro. Ayer, el líder socialista cedió el protagonismo a Meritxell Batet en Barcelona, mientras que él despejó su agenda. Aunque esta vez no se anuncie bajo el eslogan de «decisivo», la cita tiene esos tintes, dado que las opciones movilizadoras del partido pasan por este tipo de formatos en los que son capaces de reunir delante del televisor a potenciales votantes que nunca se dejarían caer por un mitin o un acto sectorial del PSOE. Aunque apenas les separan seis meses, nada tiene que ver el debate a cuatro de Atresmedia con el que se celebrará hoy. La actitud de Sánchez ha cambiado, de dispuesto a debatir «con todos, sobre todo y sin cortapisas» a poner como condición que acuda Rajoy o a pedir un «cara a cara» con él. La asistencia de éste último es también una de las novedades que benefician al PSOE. Según fuentes de la Ejecutiva, la presencia del candidato popular «rebajará» la presión de los emergentes sobre Sánchez, que en diciembre canalizó todos los ataques sobre la vieja política. El líder socialista cargará contra Rajoy por su acción de Gobierno y espera contar, en eso, con el apoyo de Pablo Iglesias y Albert Rivera.

Los representantes de Podemos y C’s tampoco llegan en igualdad de condiciones. El PSOE aprovechará que Iglesias «ya no viene virgen, sino con cinco meses de bagaje y bloqueo detrás» para desestabilizar sus argumentos sobre un gobierno del cambio y su intención de pactar con los socialistas tras el 26-J. Recordará la intransigencia del líder morado en su investidura y exhibirá sus estériles esfuerzos por formar gobierno durante dos meses. Fuentes del entorno del candidato socialista esperan que Iglesias mantenga su estrategia de «lavado de imagen» con un tono amable y continuas invitaciones a aliarse después de los comicios. Y destacan que Sánchez se dirigirá a Rajoy como principal rival a batir en el debate, para mantener su rol de alternativa e intentando paliar la polarización entre PP y Podemos que ha marcado los primeros compases de la campaña. El líder socialista intentará que Iglesias no capitalice ese papel y exhibirá al PSOE como el partido que aúna solvencia y experiencia de gobierno para hacer frente al PP. «Explicar en ocho minutos tus medidas para empleo o dependencia es complicado», comentan. Los bloques en los que Sánchez demostrará más soltura serán los de política social, por la tradición del partido, y el económico, por las «nefastas políticas que ha puesto en marcha Rajoy estos cuatro años».