CHIPS
10.000 millones de dólares y Ley de Chips: la estrategia de EEUU para liderar la industria de los semiconductores
Esta alianza marcaría un antes y un después en relación a las colaboraciones entre el sector privado y el gobierno. Las especulaciones podrían llegar a su fin cuando el Departamento de Comercio anuncie formalmente este ambicioso plan en las próximas semanas.
En esfuerzos por fabricar semiconductores en EE. UU, la administración Biden evalúa la posibilidad de conceder a Intel Corp. más de $10,000 millones. Así lo dijeron fuentes cercanas, quienes revelaron que este sería el mayor subsidio hasta la fecha, en torno a la Ley de Chips. El objetivo principal es impulsar la producción de chips, para evitar la importación de este recurso tan importante para el desarrollo tecnológico.
Las fuentes pidieron no ser reveladas porque todavía hay negociaciones
Según personas que prefirieron mantenerse anónimas (dado que las negociaciones aún están en desarrollo), el paquete de incentivos de Intel incluiría subvenciones directas y préstamos. Esta alianza marcaría un antes y un después en relación a las colaboraciones entre el sector privado y el gobierno. Así pues, las especulaciones podrían llegar a su fin cuando el Departamento de Comercio anuncie formalmente este ambicioso plan en las próximas semanas.
Esta inversión bajo la Ley de Chips no es una novedad
Las inversiones en la industria de chips en EE. UU han experimentado un aumento desde que Joe Biden asumió como presidente. Su administración ya ha otorgado 230,000 millones de dólares hasta la fecha con el objetivo de establecer al menos dos fábricas de para 2030. Es aquí donde Intel espera recuperar el mercado que lideró hace algunos años y con no requerir más chips hechos por asiáticos.
El CEO de Intel celebra este respaldo del gobierno, afirmando que gracias a la obtención de estos fondos será posible fabricar semiconductores en EE. UU. Actualmente, Intel está llevando a cabo proyectos de expansión, como la construcción de una instalación de $20,000 millones en Ohio. Además, ha invertido de 3,5 mil millones de dólares en Nuevo México y 20 mil millones de dólares en Arizona.
Con esta iniciativa intentan hacerles frente a sus mayores competidores como Samsung Electronics Co., quienes están construyendo sus propias fábricas de chips en EE. UU. No obstante, desde que fue anunciada esta noticia, Intel ha subido hasta un 1.1% en sus operaciones. Todas estas acciones del gobierno se enmarcan bajo la Ley de Chips de 2022. Esta ley, busca evitar una nueva crisis de semiconductores como la sufrida en la más reciente pandemia, donde la industria tecnológica se vio comprometida.
Se espera que pronto ofrezcan detalles del plan
Por ahora, no se han obtenido detalles sobre las subvenciones y préstamos específicos, además de las condiciones de los préstamos que variarán según la empresa. Lo que sí es seguro, es que el Departamento de Comercio impondrá condiciones para garantizar el financiamiento y respaldar el progreso de producción de chips. Aunque Intel no ha anunciado la fecha exacta de inicio de la fabricación, sus ya iniciados proyectos de expansión aseguran que será muy pronto.
Con este financiamiento, se espera fortalecer la infraestructura tecnológica en suelo estadounidense con el fin de competir en la fabricación de semiconductores desde EE. UU. Además, demuestra la importancia estratégica que supone la industria de chips para la seguridad y la economía del país. Es que, no solo se trata de Intel, ya el Departamento de Comercio ha otorgado pequeños financiamientos a otras empresas bajo la Ley de Chips.
Sobre la crisis de semiconductores
La iniciativa del gobierno de EE. UU pretende evitar otro desabastecimiento de semiconductores como el experimentado en el año 2020. Mientras el planeta se sumía en una devastadora crisis de salubridad, el mercado tecnológico también sufría consecuencias: no había producción de chips. La demanda de dispositivos aumentaba debido al confinamiento. Pero la fabricación de ellos pendía de un hilo porque la fabricación de semiconductores en EE. UU y otros países se redujo.
Tanto la obtención de materiales de producción como la posterior cadena de suministro se vio afectada fuertemente por esta crisis. Por tal motivo, la economía mundial experimentó bajas que posteriormente de las que costó recuperarse.Desde entonces, países como EE. UU han tenido que importar materiales, ya que se monopolizó la producción a solo pocos fabricantes asiáticos.
Debemos esperar un poco más
De tal manera que, este respaldo del gobierno a empresas como Intel espera prevenir la repetición de escenarios caóticos. Pero también es un claro mensaje del intento por recuperar mercados un poco perdidos que además mejoren la economía de ese país. Es posible que esperemos entre seis y doce semanas para conocer más datos respecto a estas importantes subvenciones.
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