Coronavirus

Coronavirus

Un «ejército» sanitario online que nunca duerme

Ante el colapso de las urgencias, la doctora Lalanda reunió a varios colegas en una plataforma online, que recibe miles de consultas al día. «Es algo temporal para una situación sin precedentes», asegura

La doctora Mónica Lalanda, atendiendo en la plataforma médica que ha desarrollado a raíz de esta crisis sanitaria
La doctora Mónica Lalanda, atendiendo en la plataforma médica que ha desarrollado a raíz de esta crisis sanitariaLa Razón

Ángel Nieto Lorasque - Madrid

Las dudas sobre posible contagios y otras enfermedades no paran de entrar ya sea vía correo electrónico o las redes sociales a través de la plataforma médica que ha organizado de manera exprés Mónica Lalanda. Esta médica de urgencias decidió que el modo más eficaz para que nuestro sistema sanitario no colapsase, o al menos no lo hiciera de manera drástica, sería abrir nuevos canales de consultas telemáticas para todas aquellas personas que, ansiosas en casa ante posible infección o ante la impotencia de no poder acudir a su centro de salud de referencia, tuvieran cerca a un equipo médico que les ayudara a resolver sus dudas.

«El día 14 marzo fue cuando tomé la iniciativa ante la paralización y cierre del sistema sanitario tal y como lo conocemos. La necesidad de centrarnos en lo grave y lo urgente dejó a la sociedad en un estado de ‘‘stand-by’’ para temas sanitarios. De este modo, mi primera reacción fue poner simplemente mi dirección de correo y mensajes directos de Twitter a disposición de quien tuviera dudas o para consultas médicas», explica desde su casa de Valladolid, donde se ha montado su pequeño despacho.

Pero se dio cuenta de que no era la única que había tomado cartas en el asunto, comprobó que había otros colegas que habían tenido la misma visión y quiso canalizar a toda esa buena gente con la misma idea. «Era mejor juntarnos que trabajar de forma individual. Es momento de sinergias y si una buena cosa tienen las redes sociales es precisamente esa, que es una red de personas», apunta. En apenas unas horas estaba completamente desbordada de preguntas de personas de todo el país. Fue entonces cuando pidió ayuda a una colega médica y amiga, Raquel Blasco, y la página donde Lalanda suele publicar una viñeta semanal: Acta Sanitaria. «Me valió un Whatsapp con la palabra ‘‘ayuda’’ para que otros amigos, como Esperanza Nicolás, me apoyaran».

Ahora, además de seguir canalizando pacientes a través de la web, en la plataforma Acta Sanitaria se ha preparado un alojamiento libre de propaganda y han empezado a volcar ahí los datos de los profesionales organizados por especialidades. En este momento suman ya 350 profesionales disponibles, entre los que hay médicos en activo en pública y privada, pero también otros que en el momento que estalló la pandemia de coronavirus se encontraban de baja o ya jubilados.

«Todos aparecen con su número de colegiado, especialidad y un email para recibir las consultas. Yo, cada día, les envío los nuevos casos y ellos me van dando datos de visitas y dando vuelta a las listas para que el orden varíe. Con Raquel, respondemos a una gran cantidad de consultas que entran directas a la página, por mensaje directo, a pesar de que la página deja muy claro que se acuda a las listas de especialistas. En fin, ahí vamos respondiendo, haciendo turnos, porque hay mucho trabajo», asevera.

De hecho, ella no se despega prácticamente todo el día de la pantalla del ordenador. La página que han desarrollado acumula alrededor de 30.000 visitas, no todos ellos hacen las consultas, «pero aunque solo sean la mitad de los que entran ya está bien», dice. Según explica Mónica, el perfil de los pacientes online es principalmente joven a través de las redes sociales y más mayores por email, incluso hay muchas dudas que las plantean los más jóvenes pero sobre familiares más mayores.

En estos diez días, y en función de las peticiones que ella ha recibido («no sé cuales serán las consultas de mis compañeros, porque esto es a puerta cerrada, como en las consultas tradicionales», matiza), hay una variedad de casos, desde personas con dudas generales de contagio, hasta preguntas de medicación crónica, pasando por embarazadas a punto de dar a luz y preocupadas, personas que cuidan de ancianos y otras que temen contagiar a sus niños, cómo hacer aislamiento.

Recomendaciones científicas

¿Y cómo actúan en caso de un posible caso positivo? «Valoramos si existen datos preocupantes haciendo unas cuantas preguntas. La mayoría de casos pueden y deben manejarse en casa y sin necesidad de visita médica. Insistimos mucho en eso. A Urgencias solo puede llegar lo grave», dice. Por ejemplo, les llegan muchas consultas, tanto por Facebook como mensajes directos de Twitter, de gente casi siempre joven que ha perdido el olfato de manera repentina y sin otro síntoma o con algunos inespecíficos de malestar. «Siguiendo las recomendaciones de la Sociedad Científica de Otorrino Británica y la Sociedad Científica de Neurología Española, les alertamos que muy probablemente tengan el virus, les tranquilizamos y sugerimos que hagan aislamiento dentro de su casa para no contagiar al resto de la familia», reconoce serena.

Los profesionales (no sólo médicos) que trabajan en esta plataforma insisten en que esto es algo temporal para dar una respuesta a una situación sin precedentes y también coinciden en que lo único que hacen es «seguir el principio del buen samaritano del siglo XXI». Hay que tomar nota.