Congreso

El PSOE tumba una nueva ley del PP mientras Feijóo facilita las últimas cuatro iniciativas del Gobierno

Los socialistas bloquean la tramitación de una norma de los populares para abaratar la electricidad a actividad económicas estacionales, como la agricultura

El vicepresidente primero del Congreso de los Diputados por el PSOE, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis (i) y el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados, Patxi López (d).
El vicepresidente primero del Congreso de los Diputados por el PSOE, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis (i) y el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados, Patxi López (d).Alberto OrtegaEuropa Press

Pedro Sánchez ha iniciado una dura campaña para desgastar a Alberto Núñez Feijóo, con ataques y descalificaciones. Una campaña que no parecen compartir de forma unánime en las filas socialistas (buena muestra de ello la ha dado el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que ha cuestionado que sea poco solvente como intenta proyectar el presidente del Gobierno) y que los datos tampoco avalan. Así, sin tener que echar la mirada muy atrás y viendo las últimas votaciones de este recién iniciado curso político, el PP ha dado muchos más signos de cooperación con el Gobierno que el PSOE con los populares. Y eso que una de las acusaciones de la campaña de Moncloa contra Feijóo es que es «obstruccionista» y bloquea iniciativas del Gobierno.

De las últimas cuatro leyes del Gobierno votadas en el Congreso, en el pasado pleno de la semana pasada, el PP apoyó tres y se abstuvo en una. En concreto, apoyó el dictamen de comisión de la reforma de la ley del sector ferroviario para adaptarla a la liberalización estipulada por la Unión Europea; la ley de creación y crecimiento de empresas, comprometida con Bruselas; y, la ley de cooperación para el desarrollo sostenible (en este caso, fue un debate de totalidad y rechazó la enmienda de Vox). Se abstuvo en el dictamen de comisión sobre la reforma de la ley de juego, que tiene como objeto reforzar el control en las competiciones deportivas para luchar contra el fraude en las apuestas. Pero, sobre todo, donde resaltó el apoyo del PP fue en la votación para la entrada de Suecia y Finlancia en la OTAN, ya que prácticamente ninguno de los socios de investidura lo apoyaron (Podemos, ERC o Bildu se abstuvieron).

Sin embargo, cuando aterrizan en el Congreso las iniciativas del PP, el PSOE parece poco dado a darle margen para que tengan recorrido. La semana pasada fue con la proposición no de ley para deflactar el IRPF (para ajustarlo a la inflación y evitar que las subidas salariales no queden neutralizadas por el impuesto), a la que el PSOE se opuso; y este martes ha sido con una proposición de ley para rebajar la factura eléctrica a actividades económicas estacionales (sobre todo, dirigida a la agricultura, para que puedan contratar dos potencias eléctricas en función del momento del año).

Este jueves se debaten dos leyes del Gobierno y una de ellas está en el alambre: la conocida como ley Darias, la ley para la equidad, universalidad y cohesión del Sistema Nacional de Salud, que busca blindar el acceso universal a la sanidad pública y eliminar los copagos. Sin embargo, se han presentado tres enmiendas a la totalidad (Vox, grupo plural y Ciudadanos) y Podemos amenaza con apoyarlas, lo que bloquearía la tramitación de la ley. En este sentido, el PP no ha presentado ninguna enmienda a la totalidad y se puede presentar como el aliado contra pronóstico de la norma. De momento, los populares evitan revelar el sentido del voto y están a la expectativa de ver qué acuerdan PSOE y Podemos, que están negociando cómo enmendarla.

La otra ley que se someterá al debate de totalidad es la ley Subirats, la reforma de la ley de Universidades. También está bajo amenaza, ya que se han registrado tres enmiendas: entre ellas, una del PP. En este sentido, se antoja mucho más complicado que los populares se conviertan en «salvavidas» de esta norma porque está impulsada por el ministro Joan Subirats, del ala de Podemos del Gobierno y parece difícil que entre ambas formaciones puedan llegar a puntos de encuentro. Las otras dos enmiendas son de Vox y JxCat.