Defensa
El ejército español se prepara recibir nuevas municiones de última generación
El Ministerio de Defensa ha comenzado a adquirir municiones merodeadoras Q-SLAM-40, de diseño nacional, para el Ejército de Tierra.
Las experiencias bélicas más recientes han subrayado la necesidad del Ejército de Tierra de disponer de armamento ofensivo eficaz para sus equipos de operaciones especiales. El Mando de Operaciones Especiales (MOE), por la naturaleza de sus misiones en grupos reducidos, requiere recursos inmediatos para afrontar situaciones complejas en el terreno.
En este contexto, la incorporación de municiones merodeadoras se ha convertido en una prioridad para potenciar las capacidades tácticas de estas unidades. Ya en su plan estratégico MOE 2035, el MOE había previsto la llegada de estos sistemas para identificar y atacar objetivos, mejorando así su autonomía operativa en combate.
Así, el Ministerio de Defensa y el Ejército de Tierra han avanzado en la adquisición de las municiones merodeadoras Q-SLAM-40, un sistema de armamento desarrollado por la compañía Arquímea. Esta decisión refuerza la apuesta por la tecnología y la industria nacional en el ámbito de la defensa.
El impulso a las capacidades tácticas del Ejército de Tierra
De este modo, la integración de estas avanzadas municiones en el inventario del Ejército de Tierra obedece a una planificación estructurada. El Plan de Contratación del Ministerio de Defensa (PACDEF) de 2024 ya reservó una partida inicial para estas armas autónomas, una asignación que se ha visto ampliada para el presente ejercicio de 2025, según lo publicado por Defensa.com. Este acuerdo de producción, de envergadura, se ha formalizado con Arquímea, priorizando el desarrollo nacional.
Asimismo, las Q-SLAM-40, que son de diseño español, ya están siendo suministradas a unidades como el Mando de Operaciones Especiales. Estas municiones están diseñadas para ser transportadas por un equipo de dos soldados y pueden ser desplegadas en menos de cinco minutos. Ofrecen un alcance de hasta 20 kilómetros y cuentan con una autonomía de vuelo de aproximadamente 20 minutos, lo que las convierte en una herramienta versátil.
Por otro lado, la preparación para su despliegue y el dominio de estas capacidades se puso de manifiesto el pasado 8 de abril. Aquel día se celebró una jornada de actualización sobre municiones merodeadoras en el Cuartel General del Mando de Artillería de Campaña (MACA), con la asistencia de militares del MOE y de la Jefatura de Apoyo a Operaciones Especiales (JADOE), con sede en Jaca.
En suma, la adquisición e implementación de estas municiones merodeadoras representa un avance de calado para la modernización de las Fuerzas Armadas españolas. La clara apuesta por el desarrollo autóctono en tecnología de defensa no solo fortalece la base industrial nacional, sino que también asegura una autonomía estratégica crucial para España en el actual escenario global.