
Misiones
Helicópteros de ataque españoles en el patio trasero de Putin
El Ejército de Tierra desplegará en junio dos "Tigre", un NH-90 de transporte y 60 efectivos más en el batallón reforzado de la OTAN que España lidera en Eslovaquia

A 375 kilómetros de Ucrania y a poco más de 1.000 de Rusia, en lo que podría considerarse como el patio trasero de Vladimir Putin, se encuentra la ciudad eslovaca de Kuchyna, una localidad de un país con pasado soviético en el que en la actualidad hay alrededor de 1.100 militares de seis países de la OTAN (785 son españoles), todos ellos liderados por España. Y en ese pequeño enclave del oeste de Eslovaquia de apenas 1.800 habitantes hay, en concreto, una treintena de militares de nuestro país. Aunque en breve habrá más, pues el Ejército de Tierra tiene previsto desplegar en los próximos meses (en junio como tarde) la tan ansiada unidad de helicópteros que ofreció hace casi un año y que debía haber llegado a finales de 2024, tal y como confirman a LA RAZÓN fuentes militares.
Serán, en principio, tres los helicópteros que llegarán a Eslovaquia: dos de ataque «Tigre» y uno de transporte NH-90, todos de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (FAMET). Y con ellos, un contingente de unos 60 efectivos, entre pilotos y personal de mantenimiento y apoyo. Eso, por ahora, porque la intención es que finalmente sean tres «Tigre» y dos NH-90 los que se desplieguen, con un total de 100 uniformados.
Y no han llegado antes por una serie de problemas burocráticos y de licencias derivados de la construcción de la plataforma y el hangar en la base aérea de Malacky. Unos contratiempos ya solventados, como demuestra el contrato licitado por la Dirección de Asuntos Económicos del Ejército (DIAE) el pasado 11 de febrero para la «construcción de un hangar aparcamiento para helicópteros en la base aérea de Kuchyna en el marco de la operación F-E SVK». En él, además de las características que tendrán las instalaciones, se deja claro que las obras no podrán demorarse más de ocho semanas, por lo que a finales de mayo tendría que estar todo listo de cara a la llegada de las aeronaves.
De hecho, el contrato, valorado en 977.791,196 euros, se tramita por la vía de urgencia, lo que muestra la prioridad del mismo.
Helicópteros claves en el ejercicio de la OTAN
Porque estos helicópteros tienen que estar listos para unas importantes maniobras que se celebrarán a finales de junio, en las que se certificará la capacidad de España para liderar el despliegue de una brigada completa en Eslovaquia en caso de crisis. Todo, en el marco de las dos misiones diferenciadas, pero íntimamente relacionadas, que lidera en este país del Flanco Este.
Por un lado, las Fuerzas Armadas españolas están al mando, desde el verano pasado, del batallón terrestre (escalable a brigada) de la OTAN. Una fuerza de disuasión en la que se integran militares eslovacos, rumanos, eslovenos, checos, portugueses y estadounidenses y a la que nuestro país aporta 752 efectivos, 250 vehículos (entre ellos blindados «Centauro» o «Vert»), obuses ligeros, misiles, morteros y drones. Todos ellos, situados en Lest, al sur del país.

En realidad se trata de una brigada «incompleta» que, en caso de necesidad, aumentaría rápidamente tanto sus capacidades como su tamaño, trasladando al teatro de operaciones a unos 2.800 uniformados, de los que 2.100 serían españoles. Y para que se haga en tiempo récord, entre otros motivos por la volatilidad de la situación, el batallón cuenta en suelo eslovaco con elementos de refuerzo para agilizar el despliegue del resto de personal y medios que están en alerta en España y en el resto de países contribuyentes, como, por ejemplo, un batallón de ingenieros, un grupo de artillería de campaña o varios grupos tácticos. En noviembre, este contingente multinacional ya certificó su capacidad operativa inicial de cara a convertirse en brigada.
Listos para combates de alta intensidad
Es la misión principal de las tropas españolas que se encuentran en suelo eslovaco, pero el compromiso de nuestro país no se quedó solo en ella y en su día ofrecieron (y la OTAN aceptó) desplegar en Kuchyna, lo que se conoce como un Elemento Avanzado de Cuerpo de Ejército (CFE, por sus siglas en inglés). Se trata de una especie de avanzadilla de elementos y medios del Cuartel General de Despliegue Rápido de la OTAN de Bétera (Valencia), certificado desde 2021 para dirigir a los efectivos aliados en operaciones y combates de alta intensidad.
En la actualidad son 33 efectivos que gestionan las transmisiones, la logística y las relaciones y maniobras con los países de su área de responsabilidad (República Checa, Eslovaquia y Hungría). Un elemento listo para, en caso de ataque de Rusia a los citados países, desplegar en Kuchyna a otros 350 efectivos españoles y más medios para dirigir la respuesta de la Alianza frente a esta agresión. Y esa respuesta incluye, según las necesidades y la intensidad, hasta 60.000 efectivos aliados que están preparados y en alerta en sus países para que, en cuanto la OTAN active sus planes de defensa y se dé la orden, hacer un primer despliegue en solo diez días, completándolo en un máximo de dos meses.
El mayor despliegue militar en el exterior
Y es allí, en la base aérea de esa pequeña localidad eslovaca, donde se situará la unidad de helicópteros del Ejército de Tierra. Los alrededor de 60 efectivos que les acompañarán elevarán la cifra de españoles desplegados en el país hasta los 845, manteniéndose como el mayor despliegue en el exterior de las Fuerzas Armadas.

Se trata de unos medios aéreos que son claves tanto para el batallón como para el Cuerpo de Ejército y, de hecho, la urgencia de su despliegue después de los retrasos se debe a que han de estar listos para las maniobras más importantes que llevará a cabo el contingente multinacional a finales de junio. Un ejercicio en el que, a modo de último examen para convertirse en brigada completa, se certificará su capacidad operativa final. Y en Lest se concentrarán esos 2.800 militares, la gran mayoría españoles y todos los medios disponibles. El objetivo: demostrar la capacidad de las Fuerzas Armadas españolas de, ante una amenaza o ataque, desplegar y coordinar de forma eficaz y eficiente a un gran número de efectivos en apenas diez días.
Y los helicópteros españoles, con experiencia en operaciones en el exterior como Afganistán, Mali oIrak serán un elemento indispensable, tanto para la certificación de la brigada como para cualquier amenaza real.
✕
Accede a tu cuenta para comentar