Diez contratos de transporte adjudicados al mismo empresario

El programa «Kilómetro 0» era uno de los proyectos estrellas de la Diputación para promocionar el turismo de Lugo, destinado principalmente a los ciudadanos de la propia provincial. Tan relevante era el proyecto que la Unión Europea decidió financiarlo en un 70 por ciento, con cargo a los fondos llamados FEDER. Para lograr el objetivo se necesitaba, lógicamente, contar con los necesarios medios de transportes para trasladar a los participantes por las distintas rutas establecidas. Este aspecto fue tenido en cuenta por las instituciones europeas, ya que entre las partidas que incluían esa financiación se incluía el relativo, en el porcentaje fijado, los gastos de transporte.

Sin embargo, y según se desprende de la declaración de Fernández Pulpeiro –quien fue jefe del Servicio de Protocolo de la Diputación– y de la documentación aportada al juzgado, «se observa que, sobre todo al inicio» del citado programa, «se dotan con fondos de la propia Diputación varios contratos de contratos». Sin embargo, lo que todavía no ha podido esclarecerse son los motivos por los que se actuó de esa forma.

Adjudicación irregular

En todo caso, parece que el empresario Raúl López López contaba con el beneplácito y la mayor «confianza» de la Diputación, y de su entonces presidente, Gómez Besteiro. La jueza que intruye la «Operación Pulpo» lo dejaba claro en un auto de julio del pasado año. Así, tras solicitar a la citada institución que aportara la totalidad de los contratos públicos vinculados al servicio de transporte para el mencionado programa de desarrollo turístico de Lugo, observa un dato más que significativo: «Se aportan un total de diez expedientes de contratación, observándose que todos ellos, unos contratos menores, otros contratos licitados por negociado y uno por concurso abierto, fueron irregularmente adjudicados a las empresas pertenecientes a la misma persona, Raúl José López López».

En la mayoría de los casos, añade la magistrada, se adjudicaron a la «Empresa Monforte» y tres de ellos a al «Hemisferios Viajes, SL», lo que supone que la cifra total de 852.436,59 euros fueron contrataciones adjudicadas al mismo grupo empresarial, gestionado « por el citado empresario.

Al analizar los distintos expedientes, la jueza llega a una clara conclusión: «Se evidencia la clara intencionalidad de beneficiar a las empresas de transportes relacionadas con Raúl López López , pudiendo constatar la existencia de claros fraccionamientos del objeto del contrato, así como el presunto amaño en la licitación de los distintos negociados y concurso abierto, presentando en algunos casos ofertas idénticas, y en otros, con todas las empresas vinculadas al mencionado anteriormente».

De esta forma, se evidenciaría una «clara intención de adjudicar los contratos» a las citadas empresas de Raúl López López.

Besteiro no era desconocedor de esas adjudicaciones, pues, según se encarga la jueza de dejarlo bien claro, «todos los contratos están firmados por el presidente de la Diputación, a excepción de alguno firmado por Lara Méndez –quien era mano derecha de Besteiro y es la actual alcaldesa de Lugo–, y en ninguno se ha encontrado informe de la Intervención, o secretaría de la Diputación, en la que se pusieran de manifiesto reparos a dichas contrataciones». Por otro lado, la magistrada Pilar de Lara aludía en esa misma resolución a cómo Besteiro, mediante decreto des de julio y octubre de 208 y de mayo de 2009, aprobó la constitución de un «anticipo de caja fija», con 90.000 euros, para atender «a las necesidades del servicio de protocolo».

Esta constitución, a juicio de la instructora de la «Operación Pulpo», no siguió los procedimientos reglamentarios, ya que en el primero de esos decretos se exigía «que el habilitador pagador realizara los pagamentos mediante transferencia bancaria, cheque nomitativo o domiciliación en cuenta por utilización de tarjetas, ya que los pagos a restaurantes y demás proveedores de servicios siempre ha sido en efectivo».