Foruak Orain se suma a la movilización contra la amnistía sanchista

La Plataforma Constitucionalista del País Vasco Foruak Orain ha vivido un fin de semana intenso. La breve tregua de las movilizaciones contra la amnistía, que Pedro Sánchez ha prometido a Carles Puigdemont en el acuerdo que el PSOE y Junts per Catalunya firmaron en Bruselas el pasado 9 de noviembre, ha permitido a este colectivo celebrar con serenidad su preceptiva reunión de fin de año bajo la presidencia de Ramón Rabanera. Al encuentro en la capital guipuzcoana se sumó la presencia, como invitado, del dirigente político Javier de Andrés, el hombre que ha sustituido a Carlos Iturgaiz en el puesto de máxima responsabilidad del PP vasco. La asistencia a la reunión del presidente de los populares vascos contrastó con la paradójica ausencia de Muriel Larrea, presidenta del mismo partido en la provincia de Guipuzcoa y miembro activo de la Plataforma. Larrea excusó esa ausencia alegando una reunión de trabajo de la formación política a la que ambos, ella y Javier de Andrés, pertenecen.

De Andrés expuso en la cita donostiarra su visión foralista de un proyecto alternativo al nacionalismo y al socialismo. En ese contexto, se valoró la recuperación del término “provincias” en contra de la actual denominación de “territorios”. Asimismo también se analizó la decisión del PNV de descartar al actual Lehendakari Íñigo Urkullu como cabeza de la candidatura para las próximas elecciones autonómicas y de sustituirlo por Imanol Pradales. Según Foruak Orain, la decisión peneuvista abre una ventana de oportunidad para el centro liberal vasco, que va más allá de lo coyuntural y que le permite más que nunca presentar “un proyecto a largo plazo, provincial, leal con la Corona y heredero de la historia vasca vinculada a España desde la edad Media. Un proyecto que aleje definitivamente los riesgos para la convivencia y la democracia que supone la deriva del partido de Sabino Arana como colaborador necesario en la aventura sanchista contra el régimen del 78”.

La reunión sirvió para acordar, entre otros puntos, la adhesión sin reservas a todos los pronunciamientos contrarios al proyecto de exculpación judicial que promueven tanto socialistas como nacionalistas y que concierne no solo a Puigdemont sino a los delincuentes secesionistas que le han acompañado en su aventura contra la legalidad constitucional.