Tribunales

El juicio contra el fiscal general queda visto para sentencia

García Ortiz ha declinado hablar tras ofrecerle el tribunal ejercer su derecho a la última palabra. Ahora ya solo queda aguardar a la sentencia

El juicio contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha quedado visto para sentencia. El tribunal que preside el magistrado Andrés Martínez Arrieta ha dado por zanjada la vista oral al término de la declaración del abogado general del Estado José Ignacio Ocio. Los magistrados han ofrecido a García Ortiz la posibilidad de pronunciar la última palabra, si bien este ha declinado hacer uso del ofrecimiento.

La vista ha llegado a su fin tras seis sesiones en las que han declarado casi 40 testigos además del acusado, que fue interrogado este miércoles. La última jornada de la vista se ha dedicado a los informes de las partes, las cuáles han reiterado sus posturas. De un lado, la acusación particular que representa Alberto González Amador ha reivindicado el perjuicio causado con la filtración del correo del 2 de marzo y ha denunciado el trasfondo político de su actuación.

Las acusaciones populares han insistido en que los indicios contra él se mantienen e incluso que tras su interrogatorio de este miércoles se ha incriminado más al asegurar que la verdad no se filtra, sino que se defiende. En ese sentido, han tildado de poco creíbles las testificales de los periodistas, que defendieron de manera unánime que tuvieron acceso a este documento antes de que entrara en la bandeja de correo del fiscal general la noche del 13 de marzo de 2024.

Abogacía y Fiscalía cierran filas con García Ortiz

De otro lado, la Fiscalía y la Abogacía General del Estado han cerrado filas con el fiscal general. El Ministerio Público -representado en el juicio por la subordinada directa de García Ortiz- ha asegurado que incluso aunque hubiera filtrado este correo su actuación sería "impune" toda vez que ya lo tenían periodistas a los que les llegó a través de terceras personas. Asimismo, la teniente fiscal del alto tribunal, Ángeles Sánchez Conde, ha especificado que cuando una noticia se revela a un periodista, "ya no existe el secreto".

La Abogacía General del Estado se ha pronunciado en idénticos términos a la par que ha desligado al fiscal general del papel que jugó Moncloa en la filtración de este correo en aras a reprochárselo la presidenta madrileña en la Asamblea regional señalada para el 14 de marzo. "Hay una serie de elementos extravagantes en este procedimiento como es la ramificación de la vía Moncloa (...). No se ha practicado prueba de cargo para afirmar que el fiscal general del Estado ha recibido una sola instrucción de Presidencia de Gobierno", ha apostillado.

Del mismo modo, ha achacado "mala fe" al empresario al asegurar que omitió información determinante en su querella inicial contra García Ortiz y ha dicho que la única filtración constatada en todo este proceso la produjo Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de la presidenta madrileña, al difundir a través de un chat de periodistas información sobre las comunicaciones que se intercambiaron el fiscal Julián Salto y el abogado Carlos Neira en relación con la propuesta de este último de pactar la confesión de la comisión de dos delitos fiscales.