Izquierda abertzale

Podemos ve a los agresores de Alsasua «tan víctimas» como los guardias civiles

La formación morada considera que se ha tachado de «terrorismo» lo que fue una mera «pelea de bar»

El líder de Podemos, Pablo Iglesias (d), y la portavoz parlamentaria de Unidos Podemos, Irene Montero
El líder de Podemos, Pablo Iglesias (d), y la portavoz parlamentaria de Unidos Podemos, Irene Monterolarazon

Podemos se solidariza "con todas las víctimas", tanto con los guardias civiles y sus parejas que "son víctimas porque han sido víctimas de la agresión", como con las personas "que están viéndose sometidas a un procedimiento judicial injusto y desproporcionado".

«Una pelea de bar». Eso significa para Podemos la brutal agresión que recibieron el pasado 15 de octubre dos guardia civiles y sus parejas en Alsasua. El grupo de Unidos Podemos en el Congreso de los Diputados se reunió ayer con los familiares de los nueve imputados por actos de terrorismo y tras la cita, el partido morado aseguró que éstos son también «víctimas», poniendo a la misma altura a agredidos y agresores.

Además de la reunión, el partido suscribió un manifiesto junto a otros grupos como ERC, EH Bildu, PDeCAT y PNV en el que reclaman la puesta en libertad de los tres jóvenes que permanecen en prisión, así como la «eliminación de la calificación penal como delito de terrorismo». Está firmado por 48 de los 67 miembros del grupo parlamentario de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea. El escrito ha generado malestar dentro del partido, y de hecho algunos de los diputados han decidido desmarcarse, como el guardia civil Juan Antonio Delgado Ramos y el juez en excedencia Juan Pedro Yllanes, entre otros. Delgado no lo firmó y recalcó que rechazó firmar la declaración porque supone un «uso político y miserable del terrorismo» y que él no quiere contribuir a ello. También lamentó que el texto no ponga en valor el apoyo a los agentes de la Benemérita agredidos y a sus parejas y recordó que Podemos «desde el minuto uno condenó la agresión». Por su parte, el juez Juan Pedro Yllanes sí firmó el contenido del manifiesto, pero tampoco «lo comparte al 100%» por la «devolución de la competencia al Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona, y la consiguiente puesta en libertad de los tres jóvenes». Además, considera que la reclamación a la Audiencia Nacional puede suponer una interferencia en la separación de poderes.

El líder de Podemos aseguró en los pasillos del Congreso que «está con los guardias civiles que fueron víctimas de la agresión», pero pidió «proporcionalidad» y que no se considere un delito de terrorismo. Sí ha reconocido que una agresión es merecedora seguramente de una sanción penal pero no puede convertirse inmediatamente en un delito de terrorismo porque «con ello se estaría banalizando algo tan grave como es el terrorismo».

En palabras de la portavoz adjunta de Unidos Podemos, Ione Belarra, los imputados «están siendo sometidos a un juicio injusto y desproporcionado». En su opinión, que los agresores de guardias civiles hayan sido acusados de un delito de terrorismo en la Audiencia Nacional es una calificación desproporcionada, puesto que a su juicio la brutal agresión fue una «pelea de bar». La diputada también pidió que el caso sea devuelto al juzgado de instrucción número 3 de Pamplona, de donde, según Belarra, «nunca debería haber salido», informa Ep.

Aunque Podemos diga que «se solidariza con las víctimas», lo cierto es que desde el partido en ningún momento se han puesto en contacto con los agredidos, como sí han hecho ya públicamente con las familias de los agresores, según ha criticado Inmaculada Fuentes, madre del teniente agredido. «En ningún momento, ni para apoyarnos, ni siquiera para saber nuestra versión o nuestra opinión. No les interesa en absoluto», explica a LA RAZÓN.

A ella no le sorprende el comportamiento de Podemos porque «desde el primer momento se posicionaron de una parte y ésa era la de los agresores». Sin embargo, sí considera que «no es de recibo» que Podemos utilice la palabra «víctima» para hablar de los agresores. A la frase de una de las diputadas de Podemos que habló de «una pelea de bar», la madre del teniente señala que su hijo, después de más de cinco meses, «sigue haciendo rehabilitación para intentar recuperar su tobillo». «Tanto mi hijo como el sargento y sus parejas estaban tranquilamente, no molestaron a nadie, no insultaron, y por supuesto, no agredieron a nadie», recuerda.

Sobre el manifiesto firmado ayer en el Congreso, la madre del teniente explica que aunque «cada uno es libre de pedir o solicitar lo que crea conveniente», debería ser «como ciudadano y no como político», puesto que «estás posicionándote de un lado sin conocer todos los datos». «Eso lo saben los magistrados y, en mi opinión, es muy arriesgado posicionarse tan firmemente sin conocer toda la investigación y sin siquiera hablar con ambas partes, como harían cualquier persona imparcial». En su opinión, «como políticos no deberían intentar influir en las decisiones judiciales», asegura.