Gobierno de España

Rajoy y Rivera no negocian ya ni los Presupuestos

El Gobierno acusa al líder de Cs de «mentir» sobre su acuerdo con el PNV.

Mariano Rajoy y algunos de sus ministros, ayer, junto al primer ministro turco, Binali Yildirim en La Moncloa en l
Mariano Rajoy y algunos de sus ministros, ayer, junto al primer ministro turco, Binali Yildirim en La Moncloa en llarazon

El Gobierno acusa al líder de Cs de «mentir» sobre su acuerdo con el PNV.

El Gobierno ha tenido que responder al embiste que en las últimas horas le ha lanzado Ciudadanos con el argumento de su supuesta disposición a hacer más cesiones al PNV para conseguir aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018. La formación naranja ha demostrado tener una «capacidad infinita» –como se lamentan en las filas populares– para adelantar al PP con su política de comunicación. «Se apuntan las medallas de las iniciativas o consiguen también colocarnos en posiciones en las que nunca hemos estado», se quejan con preocupación dentro del PP. La relación entre los dos partidos está reventada desde hace meses. Mariano Rajoy y Albert Rivera hablaron por última vez con motivo de la detención de Carles Puigdemont en Alemania, y desde entonces no han vuelto a intercambiar palabra. Ni siquiera sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018, y tampoco de la crisis en Madrid por la moción de censura contra Cristina Cifuentes a raíz de las irregularidades detectadas en el máster que le concedió la Universidad Rey Juan Carlos.

La última gota que ha vuelto a colmar el vaso ha sido el cruce de declaraciones con motivo de la negociación de las cuentas de 2018. Desde el partido de Rivera se han anticipado a supuestas futuras cesiones para advertir de que no permitirán que salgan adelante a cambio de renuncias del Estado en política penitenciaria, para facilitar el acercamiento de los presos etarras, o sobre la Seguridad Social.

Y en un contexto en el que Génova sabe que entre sus dirigentes cunden las críticas contra la falta de reacción del partido para frenar el empuje de Ciudadanos, ayer estalló el último choque. Desde el Gobierno cargaron contra Rivera por «mentir» sobre la negociación con el PNV de los Presupuestos. Y hasta Rajoy terció al acusar implícitamente a la formación naranja de hacer análisis sobre mentiras. En la rueda de prensa que siguió a la VI Cumbre bilateral España-Turquía, el presidente del Gobierno desmintió las informaciones que hablaban de que el PNV reclamaba en contraprestación a su apoyo a los Presupuestos la transferencia del régimen económico de la Seguridad Social para el País Vasco o el acercamiento de los presos. «Todo es mentira», afirmó. En base a esas conjeturas Ciudadanos ha lanzado serias advertencias públicas al Gobierno, hasta llegar incluso a amenazarle con retirar su apoyo a los Presupuestos si avanzaban por ese camino. Rajoy replicó: «No voy a cambiar los Presupuestos por transferencias o competencias y es absolutamente falso que haya hablado con nadie del acercamiento de presos de ETA o de la caja de la Seguridad Social».

«Soy el presidente del Gobierno y algo tendré que ver en los Presupuestos. Absolutamente nadie me ha hablado ni de las prisiones ni de la Seguridad Social». Añadió que se está debatiendo «sobre una noticia que es absolutamente falsa». «Ver cómo hay partidos que hacen análisis de cosas que no son verdad realmente no dice nada bueno en favor de la política, en general», comentó, en un golpe directo contra Rivera.

El jefe del Ejecutivo aseguró, además, que todavía no está negociando con el PNV los Presupuestos, un trámite que se abrirá una vez que el proyecto pase el debate de las enmiendas a la totalidad, que hoy comienza en el Congreso. Han presentado enmiendas de devolución el PSOE, Unidos Podemos, ERC, PDeCat, Compromís y EH Bildu. Para que las cuentas no sean devueltas al Gobierno necesitan que el PNV se abstenga en la votación de las enmiendas a la totalidad, siempre que también mantengan los otros apoyos de 2017. La previsión es que se cumpla este escenario, y a partir de ahí los Presupuestos comenzarán su debate sección por sección en comisión para someterse a su última votación en Pleno a finales de mayo. Ahí el Gobierno si necesitará el voto favorable de todos los grupos que le respaldaron en 2017, incluido el PNV y el diputado de Nueva Canarias, Federico Quevedo. El margen de negociación lo circunscriben a las cuestiones «estrictamente presupuestarias». También con el PNV. Nada de competencias ni de transferencias. Así gestionaron el acuerdo de 2017 y los nacionalistas consiguieron un importante paquete de inversiones y una ventajosa revisión del cupo.

Rajoy reiteró ayer su confianza en poder aprobar los Presupuestos y se remitió al diálogo sobre las enmiendas parciales.