Inmigración

Récord histórico de llegadas a Canarias: 8.571 personas en 15 días

El archipiélago recibió 571 inmigrantes diarios durante la primera quincena de octubre

Interceptan un cayuco con 91 migrantes en aguas de Tenerife, sexta embarcación desde la pasada noche en Canarias
Interceptan un cayuco con 91 migrantes en aguas de Tenerife, sexta embarcación desde la pasada noche en CanariasEuropa Press

La última oleada migratoria a Canarias ha desatado todas las alarmas. El archipiélago recibió 8.571 personas a bordo de 384 embarcaciones durante los primeros 15 días de octubre, unas cifras desorbitadas que se traducen en 571 llegadas diarias durante la quincena y que han continuado creciendo en los últimos días.

Según se desprende del último informe emitido por el Ministerio del Interior, estamos ante un nuevo récord en la llegada de extranjeros a las costas canarias a bordo de embarcaciones precarias, unos números sin precedentes desde la crisis de los cayucos de 2006, cuando la ruta canaria anotó su máximo histórico (contabilizando 31.678 personas). De hecho, teniendo en cuenta que el último trimestre del año es cuando más se activa el fenómeno migratorio debido al buen estado que presenta el mar, las autoridades canarias advierten de que se podría llegar a superar ese techo. En lo que va de año, Canarias ha recibido más de 25.000 migrantes y, de seguir la misma evolución, las cifras de 2006 podrían verse incrementadas.

Pese a que los primeros meses del año parecieron dar ciertos signos de estabilización (incluso de descenso), esta tendencia a la baja se rompió nada más arrancar el verano y no ha cesado de aumentar desde entonces, suponiendo un incremento del 80% en las llegadas que el año pasado por estas mismas fechas.

Situación de emergencia

Ante este repunte migratorio, la Secretaría de Estado de Migraciones ha aprobado la situación de emergencia, un trámite administrativo que no requiere ser aprobado en el Consejo de ministros y, por tanto, permite agilizar los procedimientos burocráticos. De esta forma es posible abrir más plazas y disponer de presupuesto de un modo más rápido y ágil para aminorar la presión que atraviesa el archipiélago.

Por otra parte, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en funciones, José Luis Escrivá, viajó ayer a la isla de El Hierro, la más afectada, y se reunión con el personal dedicado a la atención de migrantes en busca de soluciones. A la reunión asistieron el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, el delegado del Gobierno, Anselmo Pestana, y el presidente del Cabildo de El Hierro, Alpidio Armas, así como representantes de las entidades que trabajan en la zona.

Escrivá anunció una partida de 50 millones de euros para la gestión de los cerca de 4.000 menores migrantes que tutela el Gobierno autónomo.

Asimismo, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, estuvo en las islas días antes y comunicó que durante un mes y medio reforzará con un avión CN-235 de la Guardia Civil la vigilancia que se realiza en las costas de Senegal y Mauritania con la colaboración de ambos países para evitar que partan pateras y cayucos con migrantes hacia las islas, un esfuerzo que permitió frenar la salida de 12.5000 personas en lo que va de año.

Marlaska también resaltó la mejora de las infraestructuras destinadas a la primera acogida de las personas que llegan a las islas por esta ruta que se vienen realizando desde 2018, así como el incremento de las plantillas de Policía Nacional y Guardia Civil en El Hierro, la isla más afectada por el repunte, motivado por la desestabilización en el Sahel y en Senegal.

Sin embargo, el fenómeno migratorio sigue su curso. Ayer, Salvamento Marítimo desembarcó a 340 personas, 59 de ellas menores, que viajaban en cuatro embarcaciones hacia Fuerteventura, Tenerife y El Hierro. Y a otras 96 en aguas cercanas a Lanzarote y Gran Canaria.

También crece la ruta mediterránea

La ruta canaria es, a la vista de los datos, el destino más afectado, pero no en el único. La ruta mediterránea también se vio incrementada durante este mismo periodo. Si bien las cifras no son tan llamativas como las del archipiélago canario, desde el cambio de rumbo de Pedro Sánchez con respecto al Sáhara, este trayecto también ha registrado un mayor número de migrantes que en años anteriores. Aunque en menor medida, las entradas a la Península y Baleares por vía marítima también han registrado un aumento, pasando de 9.803 a 12.098, lo que supone un incremento del 23,4 %.

Las ciudades autónomas han sido las menos afectadas por el fenómeno migratorio. Las llegadas a Ceuta por vía marítima se han reducido a la mitad (54 migrantes frente a los 111 de 2022), mientras que Melilla ha mantenido un volumen muy similar (de 118 a 123).

El número de inmigrantes llegados de forma irregular a las ciudades autónomas saltando la valla fronteriza se ha reducido en más de un 50%, especialmente por el freno en Melilla, donde se produjeron varios saltos masivos de migrantes. En esa ciudad autónoma fueron rescatados 134 extranjeros hasta el 15 de octubre, frente a los 1.155 del año anterior (88,4 % menos). En Ceuta la caída es del 0,9 %, al pasar de 860 personas a 868.

Aun así, se aprecia un aumento en el cómputo total de las llegadas de extranjeros a España tanto por mar como por tierra, concretamente un 46,3 % más que en el mismo período del año anterior: hasta el 15 de octubre llegaron 36.814 personas frente a las 25.169 que lo hicieron durante el mismo periodo del año anterior.