Gasta una fortuna en un prostíbulo de Ames (A Coruña) y denuncia el uso fraudulento de su tarjeta

Hay muchos tipos de vicios, algunos bastante menos nobles que otros y tan viejos como el propio ser humano. Podría ser el caso de la prostitución, de la que ya encontramos referencias en la antigua Mesopotamia, donde existían templos en el que algunas mujeres practicaban el oficio de modo sagrado, ayudando al mantenimiento del lugar con el dinero obtenido.

Sea como fuere, y en distintas versiones, la prostitución ha llegado hasta nuestros días, donde continúa dejando casos de distinta índole. Por ejemplo en Ames (A Coruña), donde un hombre denunciaba ante la Guardia Civil el uso fraudulento de su tarjeta tras acudir a un prostíbulo de la localidad.

Según su relato, cuando se encontraba en el local de alterne, alguien vertió una droga en su bebida, lo que le provocó una somnolencia inusual que derivó en que se quedase dormido, momento que alguien aprovechó para hacer uso de su tarjeta dilapidando 1.761 euros en un total de 13 cargos.

Tras recibir la denuncia, la Guardia Civil inició una investigación para tratar de aclarar los hechos. Como parte del procedimiento, los agentes realizaron un análisis exhaustivo de los movimientos bancarios del denunciante y revisaron las imágenes de videovigilancia del local. También recabaron testimonios de testigos y empleados del establecimiento.

Las pesquisas permitieron determinar que no existían indicios de que el hombre hubiera sido drogado ni de que otras personas hubieran efectuado los pagos sin su consentimiento. Al contrario, los cargos habían sido realizados por él mismo de manera voluntaria, lo que llevó a los agentes a investigarlo por un presunto delito de simulación de delito.

Este tipo de infracción está tipificada en el artículo 457 del Código Penal y contempla sanciones económicas que van desde los seis hasta los doce meses de multa.