Tribunales

Macrojuicio en Vigo por uno de los grandes alijos de coca interceptados en pandemia

Esta semana se sentarán en el banquillo el presunto líder Juan Carlos Santórum, para el que se piden 18 años de cárcel, y otras 28 personas

El buque fue abordado a 400 millas de Vigo.
El buque fue abordado a 400 millas de Vigo. Redes sociales

El 25 de abril de 2020 el MV Karar fue abordado a 300 millas de Lisboa y 400 de Vigo, con 3.824 kilos de cocaína. Los presuntos destinatarios, en Galicia, serían los hermanos Santórum Navazas, y el valor estimado en el mercado ilícito de los 152 fardos ascendería por encima de los 146 millones.

Con estas cifras, el del MV Karar fue, sin duda, una de los grandes alijos de coca interceptados durante la pandemia. Una operación que ahora llega a juicio, a partir del martes, en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo.

En la macrosala de la Audiencia se sentarán Juan Carlos Santórum y otros 28 procesados -entre ellos, su hermano-, que se enfrentan a penas de entre 13,5 y 19,5 años de prisión y que, de modo conjunto, se elevan hasta los 410 años de cárcel.

El ministerio público solicita 18 años de prisión y una multa de 438 millones de euros para Santórum, considerado como jefe de la organización que se preparaba para recepcionar la cocaína que iba a bordo del MV Karar.

En el banquillo de los acusados se sentará también un funcionario de Aduanas que se enfrenta a seis años de cárcel y cuarenta de inhabilitación. Para el resto de implicados, las penas oscilan entre los dos y los 13 años y medio por delitos de diversa índole que incluyen contra la salud pública de extrema gravedad, organización criminal, blanqueo de capitales o, incluso, tenencia ilícita de armas.

Según el escrito de acusación pública, Juan Carlos Santórum dirigía una estructura para disponer de embarcaciones preparadas para operaciones de alijo de droga en altamar, y coordinaba también los contactos para contar con naves en diferentes localidades en las que poder adaptar, pertrechar y resguardar esas embarcaciones.

La investigación

Los investigadores tuvieron conocimiento de estos movimientos ya en 2019, cuando empezaron a tirar del hilo para desentramar una organización en la que participaba un empresario dedicado a la venta y reparación de embarcaciones, un funcionario del servicio de Vigilancia Aduanera, varias personas encargadas de pilotar las lanchas, y otros acusados que también gestionaban cómo se distribuiría posteriormente la droga.

Entre febrero y marzo de 2020, la organización llevó a cabo numerosas reuniones, trabajos de adaptación de las embarcaciones, y otras acciones encaminadas a realizar el alijo de la cocaína que transportaba el MV Karar. Unos trabajos que se aceleraron a partir de abril pese a la pandemia del Covid.

Finalmente, el 25 abril el MV Karar fue abordado en altamar y sus tripulantes detenidos. El buque de servicio a plataformas marinas tenía bandera de Togo y estaba “específicamente instrumentalizado” para el desarrollo del transporte del cargamento de cocaína incautado.