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¡Que llamen a Alberto Chicote para arreglar la Kitchen del PP!

Alberto Chicote, cocinero.
Alberto Chicote, cocinero.-EFE

Dicen los que de esto saben que el Gobierno y sus coleguis convertirán la comisión del caso Kitchen en un desfile de altos cargos del PP a celebrar en la pasarela del Parlamento. Esto tiene más que ver con la estética que con la ética, creo. Es cosa de imagen, de telediario. Una moda poco pasajera. No sé ustedes, pero yo no los veo a ellos (Rajoy, Casado, Fernández Díaz, etc.) en plan Jon Kortajarena, ni a ellas (Cospedal, Santamaría, etc.) como Eugenia Silva. Quizá a Pablo Iglesias le hubiera gustado desfilar para exhibir su nuevo look, pero su socio y Lola Delgado ya ha vetado investigar la caja B de Podemos, así que no habrá comisión ni pasarela. Menos mal que siempre le quedarán las televisiones como a Ingrid Bergman y Bogart siempre les quedará Paris.

Mientras, Inés Arrimadas, que para mostrar equidistancia y centralidad hasta podría apoyar una comisión de investigación a Ciudadanos, dice que su partido no va a entrar en el barro político. Pues los baños de barro dicen que son muy buenos para la piel, el sistema digestivo (tan castigado por tragar con todo) y el bienestar emocional. No sé si Casado, que debe de estar de los nervios, recurrirá a los baños de barro en Las Charcas (Murcia), pero yo en su lugar llamaría corriendo a Alberto Chicote para que se hiciera cargo de la pesadilla en la kitchen pepera. Podría enseñar a los cocineros del PP a hacer la paella alejándose de las deconstrucciones del chef Iván Redondo y, sobre todo, a dar la vuelta a la tortilla sin que se desparrame la huevada por toda Génova y lo deje todo hecho una pena, penita, pena.

Si Interior dispuso de más de 70 policías para espiar a Rosalía, la señora de Bárcenas, me imagino que para espiar al mismísimo ex tesorero llamaron a James Bond, Sherlock Holmes, Philip Marlowe, Mata Hari y los Ángeles de Charlie. Ha reconocido Trump que ocultó la letalidad del virus para evitar el pánico. Aquí, Sánchez prefiere convertir el Parlamento en la Mercedes Benz Fashion Week de Madrid para mostrar la kitchen de Génova con un modelo gore alicatado hasta el techo como si fuera cosa nueva. Ya lo dijo Coco Chanel: «Si estás jodida, ponte pintalabios y ataca».