Carlos Alcaraz se hace su primer tatuaje en honor a su abuelo

Carlos Alcaraz se ha convertido en todo un fenómeno mundial del mundo del tenis y del deporte. Sin duda, este ha sido el año del joven murciano, que con tan solo 19 años se ha consagrado como el número 1 del planeta. Pero si hay algo que le caracteriza al deportista es que, a pesar de haber alcanzado la fama y la gloria tan joven, no olvida sus raíces y de donde viene. Por eso, ha regresado a su localidad natal, El Palmar, para pasar la Navidad junto a su familia y sus abuelos, sus dos pilares fundamentales, y quienes son sus mayores fans.

Carlos Alcaraz ha aprovechado estos días de vacaciones para visitar al tatuador Ganga de su pueblo, otro artista de El Palmar en el mundo de la tinta, que cuenta con casi millón y medio de seguidores y ha tatuado a otras grandes estrella del deporte como Anthony Davis o artistas internacionales como Jason Derulo. El tenista ha querido dedicar su primer tatuaje a su abuelo, tatuándose la frase que siempre le ha dicho que le he la llevado a lo más alto del mundo del tenis: “Cabeza, corazón y cojones”.

El joven tiene muy claro que sin su abuelo y sin el apoyo que ha recibido de él y de su familia, nunca hubiese llegado a donde está ahora mismo. Por eso mismo, y para llevarlo siempre con él, se ha tatuado esta ya mítica frase conocida por todos los que han seguido la carrera del tenista. Aunque ni Carlos Alcaraz ni el tatuador han mostrado el resultado del tatuaje, los emoticonos de la publicación desvelaban lo que se ha tatuado.

Carlos Alcaraz comenzó su carrera en el club de tenis de su pueblo, El Palmar, lugar unido a toda su familia. Su abuelo fue uno de los primeros socios de la Real Sociedad Club de Campo de Murcia, más conocido como “El tiro de Pichón”, del que su padre es profesor a día de hoy de esta disciplina. Todo el clan Alcaraz ha estado muy ligado al mundo del tenis y la pasión por este deporte ha sido heredada generación tras generación.