La abuela de Daniel Sancho, angustiada por el dramático futuro que le espera a su nieto

Adora a su nieto y está viviendo la etapa más dramática de su vida. Noela Aguirre, abuela de Daniel Sancho, no ha podido cumplir sus propósitos de viajar a Tailandia para ver al hoy detenido por el presunto asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Su elevada edad y su delicado estado de salud no propician un viaje tan largo desde Madrid a tierras asiáticas.

En sus únicas declaraciones a la Prensa, realizadas hace unos meses, la viuda del recordado Sancho Gracia desvela a que "me siento muy apenada por la situación que vive mi nieto, antes de que sucediera este terrible episodio vivía conmigo, era un súper compañero, un nieto divino". Y añadía "siempre confío absolutamente en la Justicia y espero y deseo que Daniel regrese a España. Creo en la verdad de Daniel y en los dioses".

Pero la situación no parece la más propicia para que sus deseos se cumplan de inmediato. Habrá que esperar al 29 de agosto para conocer la sentencia del,tribunal que ha juzgado al chef español en las últimas semanas. Será a las diez de la mañana de ese día cuando se lea la sentencia completa.

Como ya hemos informado, Sancho se declaró no culpable del asesinato premeditado, el delito que conlleva la pena máxima, y de la destrucción de documentación ajena durante el primer día del juicio, cuando solo aceptó el cargo de ocultación del cuerpo.

Una fuente cercana al acusado califica el estado emocional de Daniel Sancho como muy afectado por las circunstancias, y aunque ha intentado demostrar en la sala la máxima entereza, incluso defendiéndose a sí mismo con un cierto aire de prepotencia, en el fondo se siente muy preocupado por el futuro que le espera en prisión, sobre todo si le encarcelan en la denominada como el Hilton de Bangkok, uno de los centros más peligrosos de Asia, también bautizado como "El gran tigre" por la forma en que "devora" a los reclusos.

En realidad su nombre verdadero es Bangkok Bang Kwang y está situada a unos siete kilómetros de la capital tailandesa. Sobre ella se ha publicado que existen denuncias de torturas, asesinatos, graves incidentes entre los reos, corrupción policial y abuso de poder. Y es que en esa cárcel se encuentran los presos más peligrosos del país, desde asesinos a viola dores, narcotraficantes, pederastas y toda clase de delincuentes extremos.