Anabel Pantoja reaparece tras la denuncia por maltrato infantil contra ella y su pareja

En medio de una nueva tormenta mediática y judicial, Anabel Pantoja ha optado por el silencio y la normalidad. La sobrina de Isabel Pantoja, envuelta en una delicada situación tras una nueva denuncia interpuesta contra ella y su pareja, David Rodríguez, ha reaparecido con una actitud relajada y sonriente, como si nada hubiera ocurrido. La influencer ha compartido en sus redes sociales imágenes de su último trabajo en Córdoba, lejos de polémicas y sin aludir directamente a la querella.

Presuntos malos tratos a Alma

La denuncia, presentada por el abogado Jesús Alexis Bethencourt Rosillo ante el Juzgado de Instrucción número 4 de San Bartolomé de Tirajana, en Gran Canaria -el mismo que investiga el caso de supuesto maltrato abierto contra la pareja desde el pasado enero-, hace referencia a la "presunta comisión de un delito de maltrato infantil". El letrado actúa en su "propio nombre y representación", y afirma colaborar con asociaciones defensoras de los derechos de la infancia.

Según se ha hecho público, el nuevo escrito recoge lo que el abogado considera "nuevas conductas de explotación infantil" por parte de los progenitores, aunque estas no estén específicamente tipificadas en el Código Penal. La noticia ha generado un nuevo revuelo en torno a la figura de Anabel, quien desde hace años convive con la atención pública que le ha granjeado su apellido y su intensa actividad en redes.

Pero ni la gravedad de las acusaciones ni la exposición mediática parecen alterar el ritmo de la excolaboradora de televisión. Anabel ha compartido con sus más de dos millones de seguidores en Instagram un vídeo grabado desde Córdoba -ciudad natal de su pareja- en el que se muestra sonriente tras una sesión de fotos: "Fin de sesión superguay y llevamos sin comer 150 horas. Buscando un restaurante, gente hambrienta", bromea mientras recorre la ciudad andaluza con su equipo de estilismo.

Es su primera aparición tras conocerse la querella, y aunque no menciona el asunto, su actitud transmite un mensaje claro: la vida continúa. A su lado, como siempre, permanece David Rodríguez, en un discreto segundo plano. La pareja se ha trasladado temporalmente desde Gran Canaria a Córdoba con su hija, en un intento de recuperar la estabilidad mientras esperan que la justicia se pronuncie.

Por ahora, ni Anabel ni David han hecho declaraciones. El hermetismo es total, aunque sus redes sociales siguen mostrando el lado más profesional, glamuroso y aparentemente despreocupado de una influencer acostumbrada a lidiar con titulares. Eso sí, el trasfondo judicial que enfrenta no es menor, y su futuro inmediato dependerá de si esta nueva denuncia es finalmente admitida a trámite.