Últimas palabras

Este es el mensaje de despedida de Julián Muñoz en el que me anunciaba su muerte cercana

"Casi todos los días nos mandábamos mensajes y yo le hacía patente todo mi ánimo en su dura batalla contra el cáncer"

Julián Muñoz en Marbella en 2024
Julián Muñoz en Marbella en 2024Gtres

En su último año de vida, Julián Muñoz y el que esto escribe mantuvimos una amistad entrañable y sincera. Casi todos los días nos mandábamos mensajes y yo le hacía patente todo mi ánimo en su dura batalla contra el cáncer. Pero siete días antes de morir, Julián me envió por WhatsApp unas frases que ya presagiaban que habría tirado la toalla y sabía perfectamente que la vida le iba abandonando a marchas forzadas: “Muchas gracias por tu cariño y tu afecto. Bueno, ya se acaba mi historia. Un abrazo fuerte, amigo”.

Desde ese triste momento, sábado catorce de septiembre, el silencio. No volvió a contestar mis mensajes. Algunos los leía, y otros, los últimos, continúan esperando que alguien los lea. En el olvido queda una promesa que me hizo a finales de agosto: "Si me recupero de esta, quedamos y te invito a comer en el puesto de Mayte. Mándame un cuestionario con unas preguntas y ya te contesto".

El cuestionario quedó sin respuesta y la entrevista se concedió al programa “¡De viernes!”. Lo entendí perfectamente, fue como el regalo póstumo, y bien cobrado, a su familia. Generoso hasta el final.

Julián Muñoz
Julián MuñozMediaset

Detrás del polémico exalcalde de Marbella, había un hombre sensible y bueno, un gran tipo, con sus aciertos y sus errores, pero una buena persona. De aquel personaje altivo, provocador, ni tan siquiera quedaban los restos. La vida y sus consecuencias le hicieron recapacitar hasta el punto de pedir perdón a todos los que creía haber hecho daño. Bien lo sabe su viuda, Mayte Zaldívar, que recibía ese perdón continuamente. Julián se fue de este mundo totalmente arrepentido de haberle sido infiel a la madre de sus hijas con Isabel Pantoja.

Desde que conocimos la existencia de ese cáncer de pulmón galopante, como él lo calificaba, la tonadillera no ha sido capaz de decir ni una sola frase de ánimo hacia el hombre al que tanto ¿amó? Muchos se preguntan si el suyo fue un cariño sincero o más bien una unión por interés. Seguro que hoy, en el fondo, tendrá algún recuerdo para quien fuera su 'Cachuli'. Por mucho que quiera mantenerle en el más profundo olvido, los recuerdos del pasado no fueron del todo malos.