Junko, la cuñada "okupa" de Isabel Pantoja, se convierte en paparazzi

Atrincherada en el piso propiedad de Isabel Pantoja, sin ánimo de abandonarlo, a pesar de la petición de la tonadillera, Junko, la viuda de Bernardo Pantoja, sorprende con su actitud frente a los reporteros que la esperan en la puerta de su domicilio.

A finales de la semana pasada aparecía en el balcón, y ante la atónita mirada de los periodistas, se dedicaba a fotografiarles con una cámara, intentando esconderse detrás de un farolillo. Una situación tan inesperada como insólita. Por un día se convirtió en improvisada “paparazzi”.

De momento, no se conocen los motivos que llevaron a la japonesa a tomar tal determinación, una actuación que no casa con la forma de actuar habitual de Junko, quien suele ser una persona discreta y jamás se había “enfrentado” a los reporteros de una manera tan desconcertante.

Desde su entorno nos llegan noticias algo alarmantes. Uno de sus vecinos revela que “Junko está atemorizada ante la posibilidad de que su cuñada acabe echándola de su casa, porque no tendría a donde ir y su situación económica es preocupante. Todos confiamos en que Isabel Pantoja demuestre un mínimo grado de humanidad y entienda la difícil situación de su cuñada.”

Dentro de dos semanas se cumplirán dos años del fallecimiento de Bernardo. Y la protagonista de esta noticia le cuidó con mimo hasta el final. Así lo rarifica la fuente anterior: “es una mujer extraordinaria, Bernardo tuvo mucha suerte al contar con su amor incondicional y sus cuidados. Es un ejemplo para todo el barrio, aquí la queremos mucho”.