Orgías interminables y sexo sin protección: el relato de otra víctima de Sean Combs

El juicio en Nueva York por las aberraciones sexuales abusos sexuales presuntamente cometidas por Sean Combs, de 55 años, deja cada día un capítulo nuevo. El productor, uno de los más poderosos de la industria musical en Estados Unidos, se encuentra encarcelado desde septiembre. Ayer fue una de sus exnovias quien prestó declaración. Utilizando Jane como pseudónimo para proteger su privacidad, describió noches interminables de hotel con varios hombres y bajo efecto de las drogas.

Los hechos a los que se refirió se remontan a finales de 2023. Jane y Sean Combs pagaron una habitación en un hotel de lujo en Beverly Hills, California. Allí esperaban otros hombres que fueron invitados a una orgía que se desarrolló con el acompañamiento de alcohol, éxtasis y cocaína.

Un cumpleaños amargo

Según relató la joven, no fue un hecho circunstancial, sino el patrón habitual durante su relación con Combs. Desde el comienzo, sus prácticas sexuales estuvieron marcadas por el consumo de drogas y la presencia de terceras personas. Añadió que la presionaba para no usar preservativo. Sus noches de hotel podían durar hasta 30 horas, dijo, y en una ocasión llegaron a extenderse hasta tres días.

La noche que describió en el juicio ella no tomó drogas. Coincidió con el día de su cumpleaños y le había prometido una velada íntima. En su lugar, recuerda que después de mantener relaciones sexuales con el segundo hombre, se retiró al baño y vomitó. Él la siguió y le indicó que el vómito le permitiría recuperarse. A continuación, le hizo volver a la habitación, donde esperaba un tercer hombre, con el que fue forzada sexualmente.

"Sentí asco", testificó Jane. "Sentí repulsión", repitió. Es solo uno de los muchos detalles escabrosos que narró Jane en el juicio por el que Combs se enfrenta a cargos de tráfico sexual, conspiración para cometer crimen organizado y transporte para ejercer la prostitución.

El productor se declara inocente y sus abogados niegan rotundamente que hubiese falta de consentimiento en los actos relatados. En el estrado, Jane no pudo contener las lágrimas al recordar su relación con Combs. Lo que comenzó como una historia romántica en 2021 fue degenerando en "noches de hotel" y libertinaje, con maratones sexuales bien elaboradas desde el punto de vista escénico y alimentadas por drogas con trabajadores sexuales. Mientras, él observaba, se masturbaba, daba instrucciones y grababa.

El chantaje del dinero

El relato de los hechos de Jane coincide en muchos aspectos con lo que contó Casandra Ventura, otra de sus víctimas.

Igual que ella, afirmó que participó en sus performances sexuales bajo presión, en parte para complacer al productor, pero, sobre todo, por temor a las represalias y el chantaje económico. Como ejemplo, Combs empezó a pagar el alquiler de Jane en 2023 y aún sigue haciéndose cargo de los pagos.