Óscar López y sus metamorfosis

Leo: “Ni autocrítica ni explicaciones. Beatriz Corredor, presidenta de Redeia, aseguró que no se produjo ningún fallo en Red Eléctrica en el apagón del pasado 28 de abril”. Corredor sigue disciplinada la doctrina del Apolo de la Moncloa: nunca rectificar y mantenerse siempre ajenos a la verdad. Al final dirá Beatriz que fue un hecho sobrenatural, como las apariciones de la Virgen o la resurrección de Lázaro, fenómenos que no podemos explicar pues superan nuestro conocimiento y las facultades puramente humanas. O dirá también, quizá, que el apagón fue una especie de aviso del Señor para que nos vayamos acostumbrando a las tinieblas del Más Allá. Cuenta Santiago González: “Ahora sabemos que Moncloa intentó llegar a un acuerdo con las grandes compañía energéticas para quitarle mancha a Red Eléctrica y repartir a pachas la responsabilidad sobre el apagón”.

El Apolo lo tiene claro: ser ministro de Transformación Digital le capacita suficientemente para transformar la realidad, las fake news y lo que haga falta

Para convertir lo sobrenatural en creíble hasta para los ateos, Beatriz necesita a Óscar López, el gran manipulador capaz de transformar a Leire Díez en una Mata-Hari al servicio del PP y el intento fallido de pacto con las eléctricas para repartir culpas a partes iguales, en un alarde de generosidad dialogante de Red Eléctrica para que fluyan las tensiones. El ministro se ha convertido, dicen, en el mago kafkiano del Gobierno que capitanea el negociado de metamorfosis de bulos. Le das uno manchado de fango, y lo deja limpio como la patena para mayor gloria de Moncloa. El Apolo lo tiene claro: ser ministro de Transformación Digital le capacita suficientemente para transformar la realidad, las fake news y lo que haga falta. Beatriz debería contar con Óscar, sí: detallaría que el apagón se produjo por el desequilibrio de tensión que provocó Ayuso cuando desenchufó a miles de ancianos en las residencias o cuando los electrocutó, a elegir. Te haría feliz, Beatriz.